Receta del mes

Serenata de bacalao

LOS PLATOS DE CUARESMA nos ofrecen la oportunidad de poner en perspectiva nuestras comidas cotidianas, resaltando la importancia de cuidar nuestro templo corporal, incluyendo en nuestra dieta de estos cuarenta días proteínas saludables provenientes del mar y carbohidratos naturales de frutas, viandas y vegetales frescos.

Esta receta ha sido parte esencial de mi vida, pues ha ido pasando de generación en generación en mi familia. El gusto de ir al mercado en busca de los ingredientes más frescos y el placer de cocinarlos y consumirlos en familia no tiene precio.

El nombre proviene de la época en que los novios llevaban serenatas a sus amadas y la familia entera celebraba el compromiso de los futuros esposos. Con el tiempo, se convirtió en plato símbolo de los Viernes Santos en muchos de nuestros países y en alternativa saludable para quienes disfrutan de una rica ensalada fresca, colorida y sabrosa.


INGREDIENTES:

  • 1 lb de bacalao salado
  • 2 cebollas moradas medianas, finamente rebanadas
  • 2 pimientos rojos o amarillos, finamente rebanados
  • 6 tomates cherry, picados en trocitos
  • 6 hojas de lechuga romana
  • 2 aguacates, cortados en rebanadas
  • 2 papas medianas, hervidas y cortadas y rebanadas
    (puedes usar otras viandas que gustes)
  • 2 huevos duros, rebanados
  • Aceite de oliva virgen y vinagre blanco al gusto
  • Sal y pimienta al gusto
  • Alcaparras o aceitunas rellenas de pimientos morrones

PREPARACIÓN

  1. En un tazón grande, lleno de agua, desala el bacalao remojándolo en el refrigerador por dos días, cambiándole el agua dos veces diarias. Mantenlo tapado.
  2. Después de dos días, corta el bacalao en pedazos de dos pulgadas y colócalos en una olla con agua. Hiérvelo por 10 minutos, escúrrelo y enjuágalo.
  3. Cuando se enfríe, desmenuza cuidadosamente el bacalao con un tenedor, removiendo a la vez cualquier espina que encuentres. Coloca el bacalao desmenuzado sobre las hojas de la lechuga en una bandeja y añade los demás ingredientes mezclándolos cuidadosamente. Rocíalo con aceite de oliva y vinagre y échale sal y pimienta a tu gusto.