El sacerdocio en México, un ministerio de peligros mortales
El cruel saldo de la aqueja a la nación azteca ha puesto en la mira a los sacerdotes católicos.
Dos sacerdotes fueron acribillados a balazos el mes pasado en Poza Rica, Veracruz, aumentando a 14 la cifra de religiosos asesinados durante la administración del gobierno actual. Los padres Alejo Nabor Jiménez Juárez, de 50 años y José Alfredo Suárez De la Cruz, de 30, fueron hallados sin vida en un paraje municipal, según reportó el Centro Católico Multimedial. Otros dos sacerdotes están desaparecidos y se teme que sus vidas estén en grave peligro, según la misma organización.
“La gran mayoría, un 80% de los casos que tenemos registrados en el reporte, tienen un claro indicio de que detrás de ellos está el crimen organizado. Ha sido de una violencia extrema, muchos de ellos han tenido casos de extorsión”, dijo el padre Sergio Omar Sotelo, del Centro Católico Multimedial al medio televisivo nacional Televisa.
Sotelo sostuvo que hoy por hoy, México “es el país de Latinoamérica más peligroso para ejercer el ministerio sacerdotal”. Estima el informe que del 2012 al 2016 se han reportado más de 520 amenazas a sacerdotes.
“Los estados con mayor incidencia son Morelos, el Estado de México, Veracruz, Tamaulipas, Guerrero y Michoacán. Me parece que varias de estas ejecuciones están ligadas con problemas de extorsión”, afirmó Eduardo Guerrero, consultor y analista en Seguridad Pública.
El Obispo de la región de Apatzingán dice que ha tenido que transferir de parroquia a algunos sacerdotes amenazados por denunciar a grupos armados.
“Es parte de la opción de vida que hemos elegido, y es parte de este momento que estamos viviendo tan importante”, señaló el padre Manuel Ríos Pardo, de Buenavista Tomatlán, en la Diócesis de Apatzingán.
El funcionario de paz, justicia y reconciliación del Episcopado, Ramón Castro, señaló que la Iglesia “no se ha quedado de brazos cruzados”, por lo que ha abierto 16 centros de apoyo a víctimas en parroquias de Acapulco y Morelos.
Caída histórica del peso mexicano
Se rompió el mes pasado la temida barrera de 20 pesos mexicanos por dólar, convirtiéndose así en la divisa más devaluada entre las monedas de mayor relatividad cambiaria con el billete verde estadounidense.
Al cierre de operaciones del pasado 20 de septiembre, sonaba la voz de alarma entre inversionistas internacionales mientras el dólar ganaba poderío económico elevando la tasa de cambio a 20.00 pesos en Banamex. En las sucursales de Bancomer llegó hasta 20.08 pesos. El alivio llegó en parte tras la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos de mantener sin cambio su tasa de interés pero los temores y el ambiente financiero continuaban volátiles.
“El temor de los inversionistas ante la incertidumbre por sus amenazas de aumentar aranceles a las exportaciones, les hizo detener algunas muy importantes que estaban por hacer. La caída del precio del petróleo, y el temor de que en Estados Unidos suban las tasas de interés, entre otros factores, han desencadenado una intranquilidad que la he sentido en varias personas con las que he hablado en los últimos días”, nos informó la periodista financiera María Sarabia de Estrella TV, afirmando que todos en México “están literalmente con la mirada hacia EU esperando el desenlace del proceso electoral”.
Y es que según los economistas mundiales, de salir electo Donald Trump aquí en Estados Unidos, México estaría en graves problemas. Juan Carlos Alderete, estratega bancario de Banorte, sugirió ante el diario El Economista que “los inversionistas apuestan contra el peso porque identifican a la moneda como uno de los activos que más puede perder en caso de que el candidato republicano Donald Trump, gane la elección presidencial en Estados Unidos”.
Todo se debe a la dependencia comercial entre ambos países y a las amenazas de Trump de renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA) y de construir un muro en la frontera entre ambos países y obligar a México a pagarlo, según dijo a la BBC Einar Moreno Quezada, académico de la Universidad de las Américas de Puebla en México.
“La figura de Trump la sienten cada vez más cerca. Y mientras eso sucede, otras reacciones de pánico podrían ocurrir como por ejemplo fuga de capitales, como han hecho en el pasado numerosos empresarios cuando hay devaluaciones tan graves”, apuntó Sarabia.