Esta pregunta del título puede ser interesante para un concurso de conocimiento. Supongo que haría pensar a mucha gente, especialmente a quienes les interesa la doctrina católica sobre el sacramento del matrimonio. Que levante la mano quién es el más listo para contestarla.

Al principio, no hubo matrimonio civil, ni religioso. Recuerda que Adán y Eva no fueron casados por lo eclesiástico. Estaban en una unión natural y tenían relación conyugal que los llevó a ser padres de Caín, Abel y Set. El matrimonio de nuestros primeros padres y de quienes les siguieron es lo que llamamos matrimonio natural.

Este es el pacto que vincula por vida a un hombre y una mujer por una unión exclusiva en el amor y la cooperación para la procreación y la educación de su descendencia. El matrimonio natural, por supuesto, no requiere formalidades ni cierto tipo de vestimentas o fiestas. El consentimiento del hombre y la mujer para formar el vínculo basta. Podemos ver que el divorcio y la infidelidad van en contra de esta institución porque obviamente tratan de romper el vínculo.

En la Iglesia Católica, creemos que nuestro matrimonio es el mismo matrimonio natural elevado por nuestro Señor Jesucristo al nivel de sacramento. Él no cambió nada de la estructura básica del matrimonio natural, solo añadió el carácter cristiano a dicha institución. Es por eso que, naturalmente en la Iglesia Católica, el matrimonio siempre es de un hombre y una mujer dispuestos a comprometerse a un consorcio vitalicio y exclusivo.

Del Concilio de Trento en adelante, todos los católicos bautizados son obligados a observar el ritual eclesiástico para el matrimonio, de lo contrario su matrimonio sería nulo y sin efecto. A este rito lo llamamos la forma canónica. Entonces, el matrimonio natural y el matrimonio canónico fueron los únicos conocidos.

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El matrimonio civil surgió durante la Revolución Francesa, en 1792. Fue entonces cuando todo tuvo que someterse a la ley civil, incluyendo el enlace matrimonial. El matrimonio eclesiástico fue relegado a un segundo plano y despojado de validez civil. Para que el matrimonio canónico tenga validez civil, la ceremonia civil debe celebrarse antes de las bodas en la iglesia. Lo que se inició en Francia se extendió por toda Europa, especialmente durante la época de Napoleón Bonaparte.

Desde Europa, la práctica del matrimonio civil comenzó a implementarse al otro lado del Atlántico. De hecho, se ha convertido en obligatorio en México, Guatemala, El Salvador, Honduras, Cuba, Venezuela, Ecuador, Perú, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Argentina. En estos países, todas las parejas deben tener su ceremonia civil primero, antes de casarse sacramentalmente. Como una nota curiosa, el matrimonio civil no es una práctica común en los países islámicos.

En el caso de los matrimonios en los Estados Unidos, aquellos que son celebrados en la iglesia tienen tanto efecto civil como canónico. No es necesario casarse dos veces. El matrimonio por la iglesia es suficiente. Por eso, requerimos siempre una licencia de matrimonio y los oficiantes de bodas también deben registrarse civilmente.

La respuesta para nuestra pregunta no es una persona. No hay inventor propiamente dicho como sabemos que lo hay para el teléfono, las bombillas, o los aviones. Simplemente, el matrimonio civil surgió y se implementó en una época en la que todo debía someterse al estado de derecho.

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Mons. Jonas Achacoso es canonista y autor de “Due Process in Church Administration. Canonical Norms and Standards”, Pamplona 2018. Es Juez Eclesiástico, Delegado de los Movimientos Eclesiales y Administrador de la Iglesia Corpus Christi (Woodside, NY). Su columna Derecho y vida puede leerse en la edición mensual de Nuestra Voz. Síguelo en Twitter.