Faber Moncada nació en el municipio de Envigado, en Antioquia, Colombia, y llegó a Estados Unidos hace 21 años. Los tres primeros años estuvo en Connecticut y luego se mudó a Queens donde actualmente reside.

Al igual que muchos inmigrantes, Faber vino buscando oportunidades y un mejor futuro. Llegó donde una tía quien le permitió estar con ella mientras que encontraba un poco de estabilidad en este nuevo país al que había llegado sin saber mucho del idioma.

Primero trabajó como cajero en McDonald’s, un trabajo que para él suponía un reto, pues debía interactuar con muchos clientes, pero en el que logró demostrar su capacidad de trabajo. En los años siguientes también fue dish washer en un restaurante y luego trabajó en un parqueadero.

Transcurría el año 2001 y Faber aún trabajaba tiempo completo en el parqueadero, cuando conoció a quien le enseñó las primeras bases de cómo hacer dog grooming (peluquería canina), que son los diferentes cuidados estéticos y técnicas especiales que, con estilo y precisión, mejoran la apariencia, bienestar integral, salud e higiene de las mascotas. “Este trabajo lo comencé por un amigo que me enseñó sobre este gremio de la peluquería canina y luego yo pensé que podía ser un gran futuro para mí ¿por qué no intentarlo y aprender?”, dice Faber, con ese acento paisa que no se ha borrado a pesar de los años.

Para entonces él alternaba su trabajo en el parqueadero con algunas citas para acicalar perritos a domicilio en su tiempo libre. Sin embargo, con el tiempo le fue tomando más cariño a su trabajo, así que al año siguiente se inscribió para estudiar en una escuela especializada llamada New York School Grooming Dogs, que lamentablemente cerró tras más de medio siglo de operaciones.