Comenzó a dar señales de vida en muchas partes del oeste de Estados Unidos con el verano más lluvioso que se tiene en registro y niveles de humedad inusualmente altos.
Ahora, el Servicio Nacional de Meteorología del país advierte que podría tratarse de “El Niño” más potente de nuestros tiempos y sostiene que sus efectos podrían sentirse en todo el planeta.
Se trata del fenómeno meteorológico que se caracteriza por un calentamiento de las aguas ecuatoriales del este del océano Pacífico y que este año ha ido cobrando tanta fuerza que se ha ganado el apodo de “El Niño Godzilla”. “Los datos que tenemos nos indican que se trata de El Niño más fuerte desde 1997, pero obviamente los modelos climáticos sólo pueden predecir lo que sucederá en unos pocos meses, así que hay que ser precavidos”, aseguró el oceanógrafo William Patzert, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA (JPL, por sus siglas en inglés) a BBC Mundo.
Patzet enumeró a BBC Mundo algunos de los efectos que, de confirmarse su fortaleza, El Niño podría tener en diferentes partes del mundo en los próximos meses:
América
El Niño hace que la corriente en chorro subtropical, que habitualmente se encuentra en el sur de México y Centroamérica, se desplace hacia el norte. Eso provocaría un invierno más lluvioso de lo habitual en el sur de Estados Unidos, lo que podría dar lugar a importantes inundaciones y deslaves. En el norte del país y el sur de Canadá, un invierno menos frío.
Patzert explica que en años de El Niño “hay una temporada de huracanes más débil en el Atlántico”, ya que los vientos que se dan no son favorables a la creación de sistemas tropicales. “Al mismo tiempo en el Pacifico oriental, debido a la elevada temperatura del agua, se registra una temporada de huracanes muy activa, en zonas como la costa de Baja California”. En el centro y el norte del océano Pacífico, “si la temperatura del agua permanece inusualmente alta, se podrían producir efectos negativos en la industria de la pesca, lo que podría impactar las economías de esos países”, explica el experto de la NASA.
“En el noreste de Brasil, El Niño suele provocar sequía, mientras que en el sur de Brasil y el norte de Argentina se registran inundaciones”.
Asia
Según Patzert, “cuando en el Pacífico ecuatorial el agua caliente se mueve hacia Sudamérica, en lugares como Filipinas, Indonesia o Tailandia se registran sequías extremas”, algo que afectaría la agricultura, y como consecuencia, podría darse un aumento del precio de los alimentos que acabaría afectando el precio de las materias primas a escala global.
Europa
“En Europa, los años en los que El Niño es potente se dan inviernos muy fríos en el este del continente, así como en el occidente de Rusia”, señala Patzert.
Otras regiones del mundo
“El sur del continente africano y Madagascar tienden a verse afectados por la sequía, y áreas del África subsahariana, que son muy secas, experimentan más precipitaciones”.
Por último, el experto de la NASA apunta que El Niño hace que el norte de Australia, igual que en el Sudeste Asiático, se vea afectado por la sequía.