WASHINGTON (Mark Pattison/CNS) — Basado en las respuestas a un cuestionario enviado a todas las diócesis de los Estados Unidos, el Centro de Investigación Aplicada en el Apostolado (CARA, por sus siglas en inglés) estima que actualmente hay alrededor de 19,000 diáconos activos en los Estados Unidos.
Sin embargo, el número está disminuyendo, reflejando las tendencias observadas en la vida religiosa y el sacerdocio durante el último medio siglo.
“Las oficinas que respondieron informaron que 410 diáconos se retiraron del ministerio activo y 378 murieron. Otros 587 fueron ordenados al diaconado permanente durante 2020”, revela el informe Esbozo del diaconado permanente: un estudio para la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU., emitido el 1 de junio. La tendencia se remonta al menos a 2014.
Los diáconos también están envejeciendo. El informe de CARA dijo que el 35% tiene 70 años o más, el 40% tiene entre 60 y 69 años, el 21% tiene entre 50 y 59 años, solo el 5% tiene entre 40 y 49 años y apenas un 1% tiene menos de 40.
“Las arquidiócesis y diócesis del rito latino informaron tener 12,292 diáconos permanentes activos en el ministerio. La única eparquía (consultada en el cuestionario) informó 11 diáconos permanentes activos. Extrapolando para incluir diócesis y eparquías que no respondieron a la encuesta, se puede estimar que hay 14,722 diáconos activos en el ministerio en los Estados Unidos, lo que es equivalente a alrededor del 78% de todos los diáconos permanentes”, dijo el informe, agregando que el número estimado de todos los diáconos es 19,008.
CARA también calcula que, si el 78% de los diáconos están en el ministerio activo, entonces el 17% están jubilados, el 2% están en licencia, el 2% han sido suspendidos del ministerio activo y el 2% están inactivos por otras razones.
La edad de jubilación varía de una diócesis a otra. El cuarenta y dos por ciento de las diócesis no tiene edad de jubilación para los diáconos. De las demás, ninguna diócesis exige que los diáconos se jubilen hasta que alcancen al menos los 70 años, mientras que el 88% exige la jubilación entre los 75 y los 79 años, y el 10% exige la jubilación entre los 70 y los 74 años. El uno por ciento no requiere jubilación hasta al menos los 80 años.
La arquidiócesis con más diáconos es la Arquidiócesis de Chicago, con 852, exactamente el doble que la Arquidiócesis de Los Ángeles con 426.
Otras diócesis y arquidiócesis con al menos 250 diáconos son, en orden descendente, la Arquidiócesis de Galveston-Houston, 367; la Arquidiócesis de San Antonio, 364; la Arquidiócesis de Nueva York, 305; la Arquidiócesis de Atlanta, 299; la Arquidiócesis de St. Louis, 297; la Diócesis de Rockville Center, Nueva York, 268; la Arquidiócesis de Filadelfia, 265; y la Arquidiócesis de Boston, 255.
Pero otras diócesis tienen una proporción mucho menor de católicos por diáconos. La Diócesis de Lexington, Kentucky lidera el camino con una proporción de 508 católicos por diácono.
Otras diócesis con proporciones inferiores a 900 católicos por diácono, en orden ascendente, son la Diócesis de Rapid City, Dakota del Sur, 640; la Diócesis de Jefferson City, Missouri, 703; la Diócesis de Bismarck, Dakota del Norte, 725; la Diócesis de Amarillo, Texas, 747; la Diócesis de Duluth, Minnesota, 779; la Arquidiócesis de Anchorage, Alaska, 783; la Diócesis de Savannah, Georgia, 871; y la Diócesis de Pensacola-Tallahassee, Florida, 893.
Según CARA, el 93% de los diáconos están casados, el 4% son viudos, el 2% nunca se han casado, el 1% están divorciados y no se han vuelto a casar, y menos del 1% se han vuelto a casar después de la ordenación diaconal.
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CARA dijo que la composición racial y étnica de los diáconos de EE.UU. es la siguiente: 72% blanca, 21% hispana, 4% asiática/isleño del Pacífico, 3% negra y menos del 1% de nativos americanos u otros.
El informe dijo que el 93% de los diáconos están incardinados en la diócesis en la que sirven, y el 6% están incardinados en otra diócesis de rito latino, pero sirven con facultades en su diócesis de residencia. Menos del 1% están incardinados en iglesias católicas orientales o como miembros de órdenes religiosas.
“Uno de cada nueve diáconos permanentes activos fue compensado financieramente por su ministerio en 2020, una continuación de una tendencia a la baja del 27% en 2001, 26% en 2017 y 15% en 2019”, dijo el informe.
Además, “el 87% de las arq/diócesis y arq/eparquías que respondieron requieren formación posterior a la ordenación de diáconos”, dijo CARA. “Entre las que requieren formación posterior a la ordenación, la mediana de horas anuales requeridas es de 20”.
La forma en que las diócesis manejan el ministerio diaconal también fue un tópico del cuestionario.
El ochenta por ciento de las diócesis que respondieron dicen que tienen un plan para la asignación y el ministerio de diáconos, y el 93% tiene un programa de formación activo para el diaconado. De los que no lo hacen, el 78% dijo que planeaba establecer uno en los próximos dos años.
Cerca de dos tercios de las diócesis tienen un consejo de diáconos activo o una asamblea de diáconos, y las diócesis que respondieron estaban divididas en partes iguales en cuanto a si tenían una política formal para los diáconos que se divorciaron o separaron después de su ordenación.
“Mientras nuestro mundo continúa lidiando con los efectos de la pandemia de COVID-19, los diáconos permanentes brindan un testimonio alentador del amor y la misericordia de Cristo”, dijo Mons. James F. Checchio, obispo de Metuchen, Nueva Jersey, y presidente del Comité de Clero, Vida Consagrada y Vocaciones de la Conferencia Episcopal Estadounidense (USCCB). .
En una declaración que acompaña a la publicación del informe CARA, enfatizó la importancia de los diáconos permanentes para la iglesia, diciendo: “Llevan la luz y la presencia de Jesús a muchas áreas diferentes de la sociedad: predicando el Evangelio en sus trabajos, dentro de sus familias, a los pobres y entre sus comunidades más amplias”.
