Mons. Robert Brennan aún recuerda las palabras de acompañamiento que el papa Francisco dirigió a los obispos estadounidenses durante su visita a Estados Unidos en 2015. «Nunca lo olvidaré, básicamente dijo: «Cuando os acercáis pastoralmente, cuando habláis con palabras de esperanza a alguien o consoláis a alguien o ayudáis en el camino, sabed que estas pobres manos viejas están dentro de vosotros, para que yo esté con vosotros en esos momentos»», recordó Mons. Brennan. «Me pareció muy reflexivo». Mons. Brennan se reunió con el papa Francisco en varias ocasiones, tanto en grupo como a solas. El tema recurrente en todas ellas, dijo, era «caminar juntos, prestarse atención unos a otros, mantener la mirada fija en el Señor». «Hace declaraciones, toma posiciones sociales, pero también tiene una piedad muy tradicional y una humildad personal real arraigada en el sentido de la oración, el amor a la Santísima Virgen, la forma en que termina cada acto diciendo «rezad por mí»», dijo Mons. Brennan. «Creo que esas son las características que perduran».
En una declaración oficial tras la muerte del papa Francisco el 21 de abril, Mons. Brennan destacó el compromiso del Santo Padre con el medio ambiente, la promoción de la unidad entre las personas de fe y los esfuerzos por mejorar la vida de los oprimidos. «Cuando el papa Francisco anunció este Año Jubilar de la Iglesia, nos llamó a ser «peregrinos de la esperanza». Hoy, la peregrinación terrenal del papa Francisco ha terminado, pero su viaje celestial acaba de comenzar», dijo. «Que Dios sea bueno con él y le recompense por la compasión que mostró a su pueblo».
Otros líderes religiosos estadounidenses recordaron al papa Francisco de manera similar. El cardenal Timothy Dolan, de Nueva York, dijo que fue un honor participar en el cónclave que eligió al papa Francisco en 2013 y darle la bienvenida a Nueva York en 2015. «Nos conmovió a todos con su sencillez, con su corazón de humilde servidor», dijo el cardenal Dolan en un comunicado. «Confiando en la tierna e infinita misericordia de Jesús, rezamos para que, ya en este momento, disfrute de su recompensa eterna en el cielo». El arzobispo Timothy Broglio, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, dijo en un comunicado que el papa Francisco «será recordado durante mucho tiempo por su acercamiento a los marginados de la Iglesia y de la sociedad». «El tránsito de esta vida del obispo de Roma nos llama a rezar por su eterno descanso y a continuar nuestro camino hacia una unión más profunda con el Señor Jesús», dijo Mons. Broglio, arzobispo de la Arquidiócesis para los Servicios Militares de Estados Unidos. «Recordamos su liderazgo al inspirar a naciones, organizaciones y personas a renovar su compromiso de cuidar unos a otros y a nuestra casa común». «Los obispos de Estados Unidos se unen en oración con los católicos de aquí y de todo el mundo y con todas las personas de buena voluntad en agradecimiento por la vida de nuestro venerado pastor», añadió. «Lloramos la muerte de nuestro Santo Padre y rogamos a San José que lo acompañe. Dale, Señor, el descanso eterno».
El arzobispo Mons. William Lori de Baltimore, vicepresidente de la USCCB, destacó en un comunicado las muchas formas en que el papa Francisco se acercó a las periferias de la Iglesia y de la sociedad en general a lo largo de su pontificado. «A lo largo de los años de su pontificado, el papa Francisco manifestó su amor por los pobres y marginados. Denunció la difícil situación de los migrantes y refugiados, las víctimas de la injusticia, los enfermos y ancianos, y la pobreza mundial», afirmó. “Alzó la voz de la Iglesia en lugares considerados «remotos» en los principales centros de población. Pidió la protección del medio ambiente como don de Dios y como hogar común de la humanidad. «En una época de polarización, pidió una sociedad más fraternal y «un nuevo tipo de política». El arzobispo Richard Henning, de Boston, señaló en un comunicado que el papa Francisco «nos llamó continuamente a una fe más profunda» y «nos desafió a alejarnos de los impulsos egoístas y a acercarnos a la comunión con los demás y al respeto por la creación de Dios».