Ricardo Stevan nació en Barranquilla (Colombia) y llegó a Nueva York hace 4 años con el sueño de montar una obra de teatro musical que había sido exitosa en Bogotá hace una década, y que formaba parte de una iniciativa cultural local para que los niños y adolescentes más vulnerables aprovecharan su tiempo libre y no cayeran en la drogadicción o las redes de prostitución.
En el marco de un programa patrocinado por el gobierno, unos 45 niños recibían gratuitamente almuerzo, además de clases de teatro, buscando minimizar el tiempo que pasaban en las calles.
Ricardo Stevan explica que además de la actuación y la música, el teatro musical involucra otras disciplinas como la danza y las artes plásticas. Así que su proyecto contaba con un maestro para cada una de ellas.
Él, que tenía su propia compañía de teatro y una trayectoria de quince años en las tablas, asumió este nuevo reto dejando a un lado las aspiraciones económicas o pretensiones de reconocimiento para apostarlo todo en un experimento social que les demostraría a aquellos niños que sus posibilidades iban mucho más allá de ver su vida consumirse lentamente en un andén.
“Arcadia la Batalla de las Hadas” es una obra de teatro musical que cuenta la historia de la princesa Azaleia del reino de Arcadia, quien pierde a sus padres en medio de una intensa lucha por el poder y el dominio.
Esta historia dedica gran parte a narrar cómo la princesa crece hasta convertirse en una líder para su pueblo y cómo, con la ayuda de todos, defiende a Arcadia de los intentos de la reina malvada por invadir su reino y apoderarse del cristal mágico que le da vida al universo.
“Azaleia, además de ser la princesa, es muy humana, resuelve conflictos, puede crear cualquier cosa igual que el más común de los artesanos de su reino, se convierte en guerrera para luchar junto a su ejército […] es lo opuesto a todas las princesas que existen en los cuentos de hadas, porque no le gusta que le sirvan sino que sirve a los demás. Ella es la que lleva las riendas de su pueblo”, asegura el autor de esta obra que, lejos de ser exclusivamente para niños, deja grandes enseñanzas a toda la familia.
La versión impresa de este cuento de hadas surgió como una idea de un nuevo proyecto gracias a la gran cantidad de ilustraciones realizadas en medio del proceso creativo del musical.
En este sueño muchos acompañan a Ricardo Stevan dándole vida y personalidad a cada uno de los personajes de esta mágica historia. Alejandro Daza es uno de ellos, un talentoso ilustrador que formó parte del equipo de montaje del musical en Colombia y es el ilustrador del libro que salió el mercado en marzo de este año.
Los padres de Ricardo también han sido claves en este proceso, ya que su mamá es diseñadora de modas y se encargó del diseño de vestuario, mientras que su papá, quien es ingeniero, fue el responsable de la escenografía.
Ricardo Stevan ha escrito varias obras de teatro pero este es su primer libro.
Existe una versión de audiolibro de forma que se puede seguir la lectura con el libro y escuchar las voces de los personajes y las canciones del musical.
Actualmente Ricardo y un equipo de 25 personas trabajan en el montaje de la obra en Nueva York, la cual está concebida para que los personajes desarrollen la historia mientras vuelan con la ayuda de arneses; contando con recursos tecnológicos que van desde gigantografía y mapping hasta efectos especiales. Se espera que este musical se estrene a mediados del próximo año.
Ricardo es literalmente un hombre orquesta que además de director de teatro es cantante, estudió diseño gráfico y mercadeo y también se desempeña como administrador en reconocidos bares y restaurantes en la ciudad.