Por Monseñor Robert J. Brennan
A través de nuestro común bautismo en Cristo, cada uno de nosotros comparte la responsabilidad de la comunidad eclesial tanto de proclamar como de vivir la Alegría del Evangelio y el Esplendor de la verdad.
Al igual que los primeros Apóstoles, siempre buscamos conocer de cerca y profundamente al Señor Jesús, buscando Su ayuda y guía en todo. Pero también como ellos, somos enviados al mundo, que tan desesperadamente necesita conocerlo, tal vez incluso sin darse cuenta de ello.
Como Iglesia, juntos somos más fuertes. Piensen en lo que logramos juntos. Si no fuera por el compromiso de los feligreses de toda la Diócesis con la Campaña Católica Anual, la capacidad de la Iglesia para brindar algunos de los servicios y ministerios básicos en la Diócesis de Brooklyn sería imposible.
La Iglesia en Brooklyn y Queens ha sido durante mucho tiempo un lugar donde se ha predicado el Evangelio de tal manera que quienes lo escuchan han tenido la oportunidad de ser transformados en el amor de Cristo.
Ahora tomamos las riendas y asumimos los desafíos y oportunidades de hoy a través de nuestro apoyo a la Campaña Católica Anual 2022. De acuerdo con el tema de este año, es nuestro momento de responder con fe, esperanza y caridad a Jesús, que nos llama a ser luz para todos. Es nuestro momento de recordar la presencia real y eterna de Jesucristo entre nosotros y cómo una presencia católica trae verdad y fortaleza no solo a nuestras propias vidas sino también a quienes nos rodean.
¿A quién apoya su ofrenda a la Campaña Católica Anual? Los que pasan hambre, los que no tienen techo, quienes no tienen acceso a la educación católica, los hombres que disciernen el sacerdocio o el diaconado y los que están enfermos y moribundos son solo algunos de los grupos que dependen de su generosidad con la Campaña Católica Anual. La Campaña también impacta directamente en cada una de vuestras parroquias: sin vocaciones, no tendrían sacerdotes; sin capacitación, no tendrían programas de educación religiosa o ministros eucarísticos, y tantas otras cosas necesarias para que vuestra parroquia propague la alegría del Evangelio. La Campaña es la principal fuente de fondos para tantos programas y ministerios que van más allá del alcance de cualquier parroquia individual y que solo son posibles gracias a su generosidad colectiva.
La asistencia dada para las matrículas de educación católica permite que aquellas familias que enfrentan dificultades financieras envíen a sus hijos a una de nuestras 70 escuelas primarias y academias católicas que actualmente educan a 19,174 estudiantes. El impacto de la pandemia del COVID-19 ha generado una mayor demanda en la necesidad de ayuda, ya sea por la pérdida del trabajo o de un familiar querido. El apoyo a la Campaña Católica Anual financia directamente los programas de becas administrados por Futures in Education. La educación católica es fundamental para la vida de nuestra Diócesis porque asegura el futuro de nuestra Iglesia en Brooklyn y Queens.
Además, 50.000 estudiantes participan en programas parroquiales de educación religiosa para quienes no asisten a escuelas católicas. Desde la pandemia, los programas de educación religiosa de nuestras parroquias han tenido que ser innovadores y creativos para mantenerse al día con los muchos desafíos. Gracias al apoyo brindado por los donantes a la Campaña Católica Anual, la Oficina de Formación en la Fe trabajó con los directores de Educación Religiosa de las parroquias para implementar aulas virtuales, registros on-line, recursos multimedia y pautas para actividades presenciales limitadas, manteniendo a todos seguros y al mismo tiempo creciendo en el Espíritu.
Su donación a la Campaña Católica Anual 2022 también apoya a Caridades Católicas de Brooklyn y Queens. Como uno de los programas más grandes de los Estados Unidos, nuestros programas de Caridades Católicas ofrecen servicios a todos, independientemente de su raza, nacionalidad o religión. Durante la pandemia, Caridades Católicas abordó el aumento de más del 1000 % en la demanda de servicios de alimentos experimentado en Brooklyn y Queens. Su donación permitirá que la Iglesia continúe caminando lado a lado con los necesitados durante estos tiempos difíciles. Los más de 1,5 millones de católicos provenientes de 167 países y que hablan más de 33 idiomas diferentes, también son atendidos gracias a su apoyo. La Oficina de Servicios Católicos de Migración ofrece a nuestros nuevos inmigrantes servicios legales, educación y defensa de alta calidad para promover la igualdad y la justicia social en una población cambiante y diversa.
La vida de cada parroquia dentro de la Diócesis de Brooklyn depende en gran medida del trabajo dedicado de nuestros sacerdotes y diáconos. Su apoyo a la Campaña Católica Anual 2022 es crucial para fomentar las vocaciones mediante el mantenimiento de programas que permitan a los hombres escuchar y responder al llamado de Dios al sacerdocio y al diaconado permanente. También apoya a los 52 hombres que se preparan para convertirse en sacerdotes y a los 35 hombres que se preparan para convertirse en diáconos permanentes, todos actualmente estudiando en nuestro seminario y programas de formación.
Esencial para la misión que Cristo nos dio son nuestras capellanías. Nuestros capellanes son los sacerdotes que sirven a aquellos que están en nuestros hospitales, prisiones, universidades y escuelas secundarias. Su dedicación y servicio ofrecen consuelo a los enfermos, luz a los encarcelados y guía a aquellos que buscan progresar a través del estudio académico. El trabajo de un capellán nunca ha sido más importante que ahora, pues asegura que a ninguno de los fieles de Brooklyn y Queens se le niegue el acceso a los sacramentos, especialmente a nuestros trabajadores de la salud y aquellos que están hospitalizados.
No olvidemos nuestra responsabilidad con nuestros sacerdotes jubilados. Han jugado un papel importante en la vida de las personas de nuestra Diócesis, y ahora es el momento de descansar y retirarse. En el Centro Inmaculada Concepción contamos con 49 habitaciones para sacerdotes jubilados con servicios de apoyo y cuidado personal como alimentación, manejo de medicamentos y transporte. Nuestra misión es darles la dignidad de una jubilación cómoda.
Quiero asegurarle que estamos comprometidos con la transparencia total y respetaremos sus deseos con respecto a los ministerios que pretende apoyar con su donación. Su donación a la Campaña Católica Anual no puede y no será utilizada en la resolución de reclamos de víctimas de abuso sexual o para cualquier otro propósito que no sea el previsto y descrito en los materiales de la Campaña. Una auditoría independiente de Grassi & Company está disponible en el sitio web de la Fundación Católica para Brooklyn y Queens.
El impacto de su donación a la Campaña Católica Anual es esencial para la gente de nuestra Diócesis y para la misión que Cristo nos ha dado. Su donación ayuda a los más necesitados entre nosotros, así como a las funciones diarias de cada una de sus parroquias. Sabemos que el Espíritu Santo está obrando en la Iglesia; solo necesitamos abrirnos a la cooperación, a la altura de los desafíos que enfrentamos como administradores del mensaje salvador y la vida que se nos ha dado en Cristo, Jesús.
Los invito a responder con fe, esperanza y caridad a su llamada bautismal haciendo una donación a la Campaña Católica Anual 2022. Les agradezco de antemano su consideración en oración y su generosidad.