En una nueva Audiencia General, desde la Biblioteca del Palacio Apostólico, el Papa Francisco, quiso advertirnos que sanar el mundo no pasa exclusivamente por el combate contra un virus, sino también por la atención prioritaria de los más necesitados.
El ejemplo de Jesús
El Santo Padre, recuerda que es un grave error hacer de la opción por los pobres una bandera política o ideológica, cuando se trata de un camino evangélico señalado Jesús “el primero en hacerlo ha sido Jesús; lo hemos escuchado en el pasaje de la Carta a los Corintios que se ha leído al inicio. Él, siendo rico, se ha hecho pobre para enriquecernos a nosotros.”
Caminar junto al “Cristo Sufrir te”
No se trata de simple asistencialismo, aclara el Papa, sino de una profunda vivencia de las virtudes cardinales, hasta descubrir a “Cristo sufriente en los pobres y dejarnos evangelizar por ellos”.
Sanar las estructuras enfermas
El Pontífice explica que este camino implica también un saneamiento de las estructuras sociales atendiendo las necesidades de los pobres ya que de las crisis “o se sale mejores o no se sale”.
Promover las industrias que incluyan a los excluidos
Finalmente Francisco propone cuatro criterios para discernir cuáles son las industrias que me merecen recibir mayores auxilios debido a su compromiso humanitario: “Hay criterios para elegir cuáles serán las industrias para ayudar: las que contribuyen a la inclusión de los excluidos, a la promoción de los últimos, al bien común y al cuidado de la creación. Cuatro criterios.” Concluyó el Papa.