En la década de 1920, la zona de Woodside, en Queens, experimentó un acelerado crecimiento de su población. En 1925 la Diócesis de Brooklyn adquirió tierras y dio inicio a la construcción de una escuela y una rectoría. Dos años después la escuela abrió sus puertas a 200 alumnos de cinco grados. En esa época el área estaba habitada por familias irlandesas o norteamericanas de origen irlandés y de clase media trabajadora.
El Domingo de Pascua de 1927, el padre John Patterson, quien en ese entonces era el párroco de la iglesia de San Rafael, ofició la primera misa en el sótano de la escuela, lugar que sirvió como iglesia provisional. Cuatro años después se construyó un convento. Con la llegada de dos sacerdotes se multiplicaron las actividades. Finalmente, en 1931 se abrió una capilla que con el tiempo se convertiría en la parroquia Reina de los Ángeles.
Eran los tiempos difíciles de la Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial, y para esta comunidad eso significó el retraso de la construcción de una iglesia. Sin embargo, lo que no tardó en aparecer fue el espíritu solidario de la comunidad encabezada por el padre Manton, a quien no era extraño ver transitar las calles en un carro rojo llevando víveres a las familias necesitadas.
Con el fin de la guerra, en el país renacieron la esperanza y la prosperidad. A esta parroquia llegó un nuevo párroco, el padre George Morrow, quien el 31 de mayo de 1951 presidió la ceremonia de colocación de la primera piedra. El 26 de octubre de 1952, el padre Morrow acompañó al obispo Thomas Molloy en la dedicación de la nueva iglesia de Santa Teresita.
Tras el Concilio Vaticano II, que el papa Juan XXIII había anunciado a principios de 1959, la comunidad se comprometió a implementar los cambios con entusiasmo. Los laicos comenzaron a formarse como lectores y ministros de la Eucaristía y se animaba a los feligreses a estudiar la Biblia. La parroquia hizo suyo el movimiento ecuménico impulsado por la Santa Sede y el llamado del Concilio a la renovación en la Eucaristía, la liturgia y los sacramentos.
Una de las novedades más notorias del Concilio fue la celebración de la misa en lengua vernácula —es decir, del país— en lugar de en latín. En esa época en la ciudad y en Woodside estaban ocurriendo notables cambios demográficos: una ola de inmigrantes hispanohablantes llegaba al país y especialmente al estado de Nueva York. Eso hizo que comenzaran a celebrarse cada vez más misas en español en las parroquias de la diócesis.
Actualmente monseñor Steven A. Ferrari es el párroco de esta comunidad formada por fieles de Ecuador, México, Colombia, República Dominicana, Brasil, Panamá, Paraguay, Portugal, Filipinas y Puerto Rico, entre otros. El párroco dice sentirse admirado por la unión de sus feligreses y el gran valor que éstos le dan a la familia.
Agrupaciones y ministerios como el juvenil, de pastoral, de la Eucaristía, cuidado de los enfermos, laico, proclamadores de la palabra, acomodadores, coro juvenil, infantil y de adultos ; servidores del altar, grupo carismático, cursillistas, San Vicente de Paul y la catequesis en inglés y español, son los más destacados en esta parroquia que en octubre de 1988 fue rededicada por el obispo de Brooklyn, Francis Mugavero.
Uno de los programas más activos de esta parroquia, según explica monseñor Ferrari, es la despensa de alimentos. Los organizadores del programa invitan a la comunidad a donar alimentos el último domingo de cada mes. Gracias a las donaciones, cada martes brindan ayuda a cerca de 90 familias. Además, para recaudar fondos han organizado una biblioteca circulante con libros donados a la parroquia. Los fieles y sus hijos pueden llevar libros prestados a sus casas pagando tan solo $1. Así ayudan a garantizar la continuidad de la despensa de alimentos.
La devoción al Divino Niño cuenta con dos grupos en esta parroquia: los colombianos, que celebran su fiesta en junio; y los ecuatorianos, que en Navidad organizan una novena y una fiesta multitudinaria con comida, música y bailes típicos. Además, hay numerosas devociones que diferentes grupos celebran con entusiasmo año tras año: la Virgen de la Altagracia, la Virgen del Cisne, la Virgen de la Nube, la Virgen de Guadalupe y Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, así como los mártires filipinos san Lorenzo Ruiz y san Pedro Calúñgsod.
INFORMACIÓN
Parroquia Santa Teresita
50-20 45th Street, Woodside NY 11377 Teléfono: 718 – 784 – 2123 www.saintteresachurch.org
Horario de las misas:
Sábado: 5:00 p.m. (inglés)
Domingo: 9:00 a.m. y 12:00 p.m. (inglés) y a las 10:30 a.m. (español)
Lunes a viernes: 8:00 a.m. (inglés) Miércoles: 7:30 p.m. (español)
Confesiones: Sábado 4:00 p.m.
Párroco: Monseñor Steven A. Ferrari
Horario de la Rectoría:
Lunes a viernes:
9:00 a.m. a 12:30 p.m. y de 1:30 p.m. a 8:00 p.m.
Sábado: 9:00 a.m. a 3:00 p.m. Domingo: Cerrada