Una adolescente es violada y asesinada en un camino poco transitado en las afueras de un pueblito sureño. Casi un año después, la investigación está estancada y la madre de la joven, profundamente frustrada ante lo que considera la indolencia de la policía, alquila tres vallas anunciadoras que hace tiempo permanecen abandonadas, justamente en el sitio del crimen.
En ellas pone unos escuetos anuncios que recuerdan el terrible hecho y cuestionan la actuación de la policía y directamente a su jefe. Semejante declaración de guerra desata una cadena de amenazas, represalias, acosos y acciones violentas que revelan las pasiones que se agitan bajo el aspecto aparentemente apacible del pueblo.
El anglo-irlandés Martin McDonagh, guionista y director de la cinta, narra esta tensa historia alternando momentos de gran intensidad dramática con sorprendentes giros de humor negro, siempre en la proporción justa para revelarnos la profunda humanidad que late en los personajes. En entrevista con el diario español El País, McDonagh ha explicado: “Es algo natural para mí, es mi forma de ver el mundo. Estamos rodeados de tragedia, de miseria y de tristeza. Si no fuera por el humor no podríamos ni levantarnos de la cama”.
El intenso ritmo narrativo se refuerza con cada inesperado giro argumental, que descubre nuevas facetas de las complejas personalidades involucradas y nos arrastra en el seguimiento de una trama que nunca sabemos a dónde nos llevará, mientras aborda temas trascendentales como la enfermedad y la muerte, la represión y la justicia, la venganza y la reconciliación.
Tres anuncios por un crimen ha ganado, entre otros, el codiciado premio del público en el Festival de Toronto; el premio al mejor guión en el Festival de Venecia y en los premios BAFTA; el Globo de Oro a la mejor película dramática y el premio BAFTA y la nominación al Oscar como mejor película del año.
Las actuaciones son magistrales: Frances McDormand como Mildred, la irreductible madre de la víctima, y Sam Rockwell, como el atolondrado policía Dixon, arrasaron con el Oscar, el Globo de Oro y el premio BAFTA a la mejor actuación protagónica femenina y la mejor actuación masculina en papel de reparto, categoría esta última en la que fue también nominado al Oscar y los premios BAFTA Woody Harrelson, quien encarna al terriblemente malhablado pero juicioso jefe de policía Willoughby.
Desde la secuencia inicial, cuando Mildred concibe la idea de los letreros, hasta su polémico final, Tres anuncios… nos invita no a juzgar, sino a acompañar y comprender a sus personajes, y a ponernos en su situación mientras ellos, como nosotros, vacilan y sopesan las alternativas ante cada encrucijada que les plantea la vida. Sus dilemas, y su modo de resolverlos, seguirán haciéndonos reflexionar mucho después de que abandonemos el cine.