CIUDAD DEL VATICANO (Por Junno Arocho Esteves/CNS)—. El escándalo de abuso sexual de menores y adultos vulnerables cometido por sacerdotes ha afectado la credibilidad de la Iglesia Católica y su misión de predicar el Evangelio, dijo el secretario de estado del Vaticano.
“No es fácil decirlo porque este escándalo de abuso sexual por clérigos verdaderamente nos ha afectado y continúa afectándonos —a todos— y tiene un efecto devastador en la vida y en el testimonio que la iglesia le ofrece al mundo”, dijo el cardenal Pietro Parolin.
En una entrevista el 22 de agosto con la edición en inglés de Vatican News, el cardenal Parolin dijo que la visita del papa a Irlanda es un viaje de esperanza de ayudar a la iglesia y las familias del país a formar una sociedad donde los niños y personas vulnerables estén seguros.
El Vaticano confirmó el 21 de agosto que el papa Francisco se reunirá con sobrevivientes del abuso sexual durante su viaje a Irlanda el 25 y 26 de agosto para el Encuentro Mundial de las Familias, pero no reveló la fecha, la hora ni el lugar.
El cardenal Parolin dijo que el papa le ha recordado consistentemente a la iglesia que “nuestro primer deber es atender a las personas que han sido afectadas — las víctimas de este trágico fenómeno”, y el cree que “la iglesia en Irlanda ha continuado sus esfuerzos de atender y prevenir el abuso sexual”.
“Creo que la iglesia en Irlanda ha reconocido sus defectos, sus errores, sus pecados y a la vez también ha proporcionado medidas que pueden prevenir que estas atrocidades, estos horrores se repitan”, dijo el cardenal en una entrevista aparte con la edición italiana de Vatican News.
Él añadió que la iglesia se mantiene cerca de los que sufrieron el abuso de los clérigos y está comprometida “a ayudarles para que puedan rehacer sus vidas”.
“Creo que el viaje del papa a Irlanda sucede sobre todo bajo la señal de la esperanza, esta capacidad de esperanza y confianza — precisamente lo que llamo el poder liberador, transformador y salvador del amor de Dios — que se experimenta en la familia”, dijo el cardenal Parolin.
