En la habitual catequesis de los miércoles, dentro de la Audiencia General realizada en la Piazza di San Pietro, el Papa Francisco ha abordado el texto de Hch. 14: 27 a fin de poner en evidencia la naturaleza misionera de la Iglesia de Cristo y la corresponsabilidad de todos en la proyección de una Iglesia en salida.
El Libro del “Largo Viaje de la Palabra de Dios”
El Santo Padre remarcó como la hostilidad y la persecución vivida por los primeros misioneros fueron aprovechados también como instrumentos de la Providencia para “involucrarlos en el largo viaje de la Palabra de Dios”. La Palabra debe anunciarse y anunciarse en todas partes, afirma Francisco explicando cómo los primeros cristianos supieron transformar la “persecución” en “oportunidad.” “Los cristianos no tienen miedo; deben huir, pero huyen con la Palabra, y difunden la Palabra un poco por todas partes.”
La Naturaleza de la Iglesia
“La Iglesia es en salida o no es Iglesia” aseveró el Pontífice quien comparó a la Iglesia con una “tienda de campaña” que permanentemente se está ampliando para ser más acogedora. Invito también a tener siempre abiertas las puertas de los templos como signo de una Iglesia abierta, puesto que “la Iglesia está llamada a ser siempre la casa abierta del Padre,” concluyó el Papa.
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La Conversión de los Paganos
Frente a la controversia respecto a la conversión de los paganos, el Papa afirma que se convoca al primer concilio en Jerusalén, donde son decisivos los discursos de Pedro y Santiago que “invitan no a imponer la circuncisión a los paganos, sino a pedirles que rechacen la idolatría y todas sus expresiones.” De aquí surge un grande ejemplo para los tiempos subsiguientes de cómo la Iglesia gestiona las diferencias y se busca la Verdad en el Amor: “Nos recuerda que el método eclesial para la resolución de conflictos se basa en un diálogo de escucha atenta y paciente y en el discernimiento realizado a la luz del Espíritu. Es el Espíritu, de hecho, el que ayuda a vencer los cierres y las tensiones y trabaja en los corazones para que, en verdad y en bien, puedan alcanzar la unidad.”
Pedir la Gracia de la Comunión
El Santo Padre concluye invitando a rezar pidiendo la Comunión en la Iglesia, especialmente pidiendo por los sacerdotes y los obispos: “Ayúdanos [Señor] a vivir el diálogo, la escucha y el encuentro con los hermanos en la fe y con los que están lejos, a saborear y manifestar la fecundidad de la Iglesia, llamada a ser en todo momento Madre gozosa de muchos hijos ”