Casi sin darnos cuenta, hemos llegado a la mitad de año. Y nuestros hijos siguen creciendo sin parar; y vemos con sorpresa que la conclusión del año escolar está ya a la vuelta de la esquina. Pareciera que los niños recién comenzaron el curso escolar, pero ya es hora de empezar a prepararnos para el verano y toda la diversión y cuidados que esta estación trae consigo.
Es tiempo de estar alertas: estadísticamente, el verano es la época del año en que ocurren más muertes infantiles debido a descuidos, a negligencias fácilmente prevenibles o quizá por desconocimiento de precauciones que todos deberíamos tomar.
Como padre, uno debe de desarrollar el sentido de la precaución cuando nuestros hijos están en áreas públicas de diversión. La atención a los niños pequeños debe ser extrema, ya que los niños menores de tres años pueden sufrir consecuencias graves por cosas que a los niños mayores no los afectan.
Ir a la piscina es una actividad normal para adultos y niños, por ejemplo, pero para un bebé puede ser algo extremadamente peligroso si se le deja sin atender. Aun cuando los padres estén cerca, dos segundos de descuido podrían poner al bebé en peligro mortal. Si usted tiene niños pequeños y piensa ir a la piscina, nunca le dé la espalda a su hijo, y manténgalo lejos de la piscina cuando no estén en el agua. Aunque usted les diga que no se acerquen al agua, los niños pequeños a veces ignoran la orden porque a esa edad desafiar la autoridad de los mayores es como un juego para ellos.
Ciertos alimentos también pueden poner en peligro la vida de los niños. Muchas veces aunque los pediatras nos aconsejen, nosotros hacemos caso omiso de restricciones que nos dan. Muchas madres les dan comidas sólidas a los bebés antes de tiempo y piensan que sus hijos están listos para comer de todo. ¿Sabía usted que las salchichas, las uvas, las palomitas o rositas de maíz y las zanahorias pequeñas, entre otros, son alimentos prohibidos para menores de tres años? La razón de esta prohibición es precisamente las numerosas muertes que estos alimentos han ocasionado.
Por otra parte, hay precauciones que se pueden tomar para que los niños disfruten de estos alimentos sin peligro. Las salchichas, las uvas, las zanahorias, se deben de cortar en trozos pequeños, del tamaño de la yema de su dedo meñique, para que el niño las pueda comer sin peligro. Las palomitas de maíz tienen una tela o cubierta que se puede adherir al paladar y hacer difícil la respiración, por lo tanto es recomendable evitarlas a temprana edad o limpiarlas de esta capa antes de dársela a un niño pequeño.
Una última cosa. Hay algo que quizá no signifique un peligro inmediato pero que podría traer graves consecuencias a largo plazo: la excesiva exposición al sol. Cuando su niño vaya a estar expuesto al sol, use de protector solar para la piel. Así se evitan las quemaduras de la piel que tanto molestan a los niños, y se evitan problemas más graves en el futuro.
Podemos disfrutar con nuestros peques del hermoso verano en esta hermosa ciudad, de todo lo que nos ofrece en esta temporada: solo nos toca extremar nuestras precauciones, sobre todo cuando estamos fuera de casa. Recuerde: mientras ellos se divierten, nosotros los cuidamos…
