CIUDAD DEL VATICANO (Por Cindy Wooden/CNS) — La persecución es obra del demonio y aunque la persecución anticristiana es evidente en muchas partes del mundo, el demonio también está atacando la imagen y semejanza de Dios que está presente en muchas otras personas, dijo el papa Francisco.
“Hoy, en el mundo, no solo los cristianos son perseguidos; los humanos, el hombre y la mujer, porque el padre de toda persecución no tolera que sean imagen y semejanza de Dios. Y ataca y destruye esa imagen”, dijo el papa Francisco el 1 de junio durante la Misa en la Casa Santa Marta.
Desde el principio del mundo, como lo cuenta el Libro de Génesis, el demonio ha intentado “destruir la armonía que el Señor creó entre hombre y mujer, esa armonía que deriva de ser imagen y semejanza de Dios”.
La injusticia que deja millones de personas en el hambre, la explotación, la esclavitud moderna y la tortura — aun “70 años después de la Declaración de los Derechos Humanos (de la ONU) — son todos formas de persecución”, él dijo.
Las “colonizaciones culturales”, o la presión que algunas naciones ejercen sobre otras para que acepten prácticas que van en contra de sus propias culturas, son otra forma de persecución, dijo el papa. El papa Francisco a menudo ha denunciado las prácticas mediante las cuales las naciones ricas donantes intentan imponerle a naciones más pobres la aceptación del aborto, la anticoncepción o las actitudes liberales hacia la homosexualidad y el matrimonio homosexual como condiciones para recibir ayuda.
Él dijo que la lista tiene que incluir la guerra, que es uno de los mayores “instrumentos de destrucción de la gente, de la imagen de Dios”, y los que planean la guerra y trafican en armas están implicados en la destrucción de lo que Dios creó.
En la historia bíblica de Adán y Eva, él dijo, el demonio pudo ser exitoso usando “el engaño, la seducción, con las armas que él utiliza”.
“También hoy hay una fuerza, yo diría una especie de rabia o de ira, contra el hombre y la mujer”, dijo el papa Francisco.