CIUDAD DE MÉXICO (Por David Agren/CNS)—. La conferencia de obispos mexicanos confirmó que 152 sacerdotes en los últimos nueve años han sido suspendidos de su ministerio por abusar sexualmente de menores.
En una declaración publicada el 12 de febrero, la conferencia publicó la figura preliminar, aunque prometió que: “En los siguientes meses se continuará con el esfuerzo por tener el diagnóstico completo de casos de abuso sexual infantil en México”.
La declaración se hizo pública después de que el arzobispo Rogelio Cabrera López, presidente de la conferencia de Monterrey, dijo a periodistas el 10 de febrero: “Han sido retirados del ministerio 152 sacerdotes. Algunos, por el tamaño de la culpa, han tenido que ir a la cárcel, algunos ya compurgaron la culpa y otros están todavía haciéndolo”.
La conferencia de obispos prometió “tolerancia cero” en casos de abuso sexual infantil por parte del clero y dijo que reveló las cifras en el interés de la transparencia.
El abuso sexual constituye una de las realidades mas dolorosas de la Iglesia católica. Con estas acciones claras, transparentes y contundentes deseamos recuperar la confianza de los fieles y lograr que la Iglesia continúe con su misión evangelizadora. https://t.co/GOAFwHkNpe
— CEM (@IglesiaMexico) February 12, 2019
Los casos pasados de abuso sexual cometidos por el clero han escandalizado a México, pero también han traído acusaciones de encubrimiento de delitos y falta de voluntad para reconocer el problema.
En su declaración, la conferencia de obispos dijo que había creado un “equipo nacional para la protección de menores”, que comenzó a funcionar el 7 de enero. Entre los primeros desafíos del equipo “estaba la ausencia de estadísticas nacionales sobre casos de abuso sexual infantil por parte de clero”, aunque actualmente se están recolectando cifras de organizaciones católicas.
Protocolos para identificar y responder a casos de abuso sexual clerical también se han desarrollado, y la capacitación a nivel diocesano se está llevando a cabo, según el comunicado.
“La iglesia está, hoy más que nunca, cooperando con las autoridades del país, especialmente en los casos de abuso contra menores por parte de clérigos, de conformidad con las leyes mexicanas”, dice el comunicado.
“La sociedad y los miembros de la iglesia lo exigen pues no podemos permitir un caso más”, agregaron.