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NUEVA YORK – Menos de dos meses después de participar como delegado en el Sínodo de los Obispos sobre la Juventud, que llamó al liderazgo de las mujeres dentro de la Iglesia “un deber de justicia”, Mons. Frank J. Caggiano, obispo de Bridgeport, estableció un nuevo modelo de liderazgo en una parroquia de Connecticut, designando a una laica coordinadora de vida parroquial.
El nombramiento de la Dra. Eleanor W. Sauers, anunciado el domingo 9 de diciembre en una carta a los feligreses de San Antonio de Padua en Fairfield, Connecticut, otorga a Sauer la autoridad de decisión sobre un equipo de sacerdotes que serán responsables del ministerio sacramental.
“Estamos en un momento muy particular en la historia de nuestra Diócesis, y de hecho, dentro de nuestra Iglesia”, escribió Caggiano a los feligreses. “Mientras viajo por todo el condado de Fairfield, me he dado cuenta de que muchas mujeres y hombres laicos buscan nuevas formas de servir a sus parroquias y, en colaboración con el clero, crear comunidades vibrantes y prósperas”.
Luego señaló que este nombramiento era el primera de su tipo en la diócesis de Bridgeport y agregó que está apoyado en el derecho canónico.
Sauers, quien tiene una licenciatura de Emmanuel College, en Boston, y una maestría y un doctorado en filosofía de la Escuela de Graduados en Religión y Educación Religiosa de la Universidad de Fordham, ya había asumido un amplio liderazgo dentro de la parroquia luego de la prematura muerte de su antiguo sacerdote, el padre John Baran, que falleció a los 59 años en marzo.
Mons. Caggiano explicó que su decisión de nombrar a Sauers se produce después de un período de discernimiento, que incluyó dos reuniones con los líderes de la parroquia.
“Sus responsabilidades, como las de cualquier sacerdote o diácono designado como Administrador, es trabajar con la comunidad parroquial para desarrollar y fomentar su visión y misión pastoral”, escribió. “Ella estará presente en la parroquia en momentos de celebración y tristeza. Su educación, formación y experiencia la hacen que esté profesional, académica y espiritualmente lista para este rol”.
En un evento de Theology on Tap el mes pasado en Washington, DC, que reflexionó sobre el Sínodo sobre los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional, se le preguntó a Mons. Caggiano cómo implementaría el llamado del Sínodo para la inclusión concreta de mujeres en el liderazgo de la Iglesia.
En ese momento, dijo que esperaba hacer un anuncio en las próximas semanas para designar a la primera mujer que dirigiría una parroquia dentro de su diócesis.
Mons. Caggiano fue uno de los seis obispos de los Estados Unidos que se desempeñaron como delegados durante el Sínodo de octubre en Roma que declaró en su documento final que “la ausencia de voces y puntos de vista femeninos empobrece la discusión y el camino de la Iglesia, restando una contribución preciosa al discernimiento”.
“El Sínodo recomienda que todos estén más conscientes de la urgencia de un cambio ineludible”, añade esta declaración.
La designación de la Dra. Sauers entra en vigor el 1 de enero de 2019.