ASTORIA – El Obispo de Brooklyn, Mons. Robert Brennan, reconsagró la Iglesia de San José en Astoria el 9 de junio después de que la iglesia fuera profanada el día 5 de junio.
Mons. Brennan guió a la parroquia con las distintas oraciones y bendijo el altar, la capilla de oración, las paredes y a los fieles con agua bendita.
En la Misa de Desagravio, Mons. Brennan dijo: “Venimos hoy aquí con un sentimiento de tristeza, con un sentimiento de dolor por lo ocurrido en esta iglesia, pero también con un sentimiento de esperanza. Rezamos para que a este hombre se le muestre la misericordia de Dios y encuentre la ayuda que necesita.”
Un hombre de 21 años, que parecía estar emocionalmente perturbado, entró en la iglesia de San José de Astoria el 5 de junio, rompió el tabernáculo, sacó la Sagrada Eucaristía guardada en su interior y la arrojó al suelo, según informaron las autoridades eclesiásticas.
Según la diócesis de Brooklyn, la policía del distrito 114 respondió a una llamada al 911 esa noche en relación a un hombre que estaba rompiendo cosas dentro de la iglesia en 28-47 43rd St. y tratando de hacerse daño.
La diócesis dijo en un comunicado del 7 de junio que el hombre entró por una puerta que se había dejado abierta para acceder a la adoración eucarística. El hombre rompió fotos del Papa Francisco y de Mons. Brennan.
Después entró en la sacristía y se puso los ornamentos sacerdotales. La diócesis señaló que un sacerdote lo encontró “golpeándose violentamente en la cabeza con una custodia, un recipiente religioso utilizado para mostrar el Santísimo Sacramento, cortándose y sangrando sobre la custodia y la vestidura.”
Se llamó al servicio de emergencias y el hombre fue trasladado al Hospital General de Elmhurst para ser evaluado. No se efectuaron detenciones. La policía no dio a conocer el nombre del individuo.
El incidente conmocionó y perturbó a las personas cercanas a la iglesia. “Se produjo una profanación del Santísimo Sacramento en San José”, declaró a Nuestra Voz el padre Jean Tanisma, vicario parroquial.
Marlene Kaselis, feligresa desde hace 50 años, se declaró conmocionada y entristecida.
“Es una sensación horrible, muy triste. Es triste, en primer lugar, que alguien sienta que es necesario entrar en la iglesia como lo hizo y hacer lo que hizo”, dijo a Currents News.
“Pero también sabemos y comprendemos que la persona que lo hizo tiene problemas mentales”, añadió.
El párroco, el padre Vincent Chirichella, dijo a Currents News que el incidente fue especialmente doloroso porque tuvo lugar menos de una semana antes del domingo de Corpus Christi.
“Es como si nos hubieran violado. Y sí, se siente como si se hubiera hecho algo atroz, porque en esta semana, estábamos entrando en el Domingo de Corpus Christi, lo que consideramos más sagrado, el cuerpo y la sangre, el alma y la divinidad del Señor”, dijo.
“El Santísimo Sacramento fue profanado en nuestra casa, en esta casa de San José. Así que para nosotros fue muy, muy perturbador”, añadió.
Según el padre Chirichella, podría haber sido mucho peor, ya que el intruso también bajó al sótano, donde intentó esparcir disolvente de pintura por el suelo. “Gracias a Dios no tenía cerillas”, dijo.
Sin embargo el padre Chirichella también afirmó que instaría a sus feligreses a rezar por el problemático joven.
Además, la iglesia ha pedido a la policía de la comisaría 114 que realice un estudio de seguridad del edificio para ver qué medidas de seguridad adicionales podrían adoptarse.
En la Misa de Desagravio, Mons. Brennan dijo: “Cuando ocurren algunas de estas cosas terribles, Dios tiene una manera de utilizarlas como una oportunidad para la renovación”.
“La Misa de Desagravio de hoy ha sido una oportunidad para que la comunidad parroquial de San José se renueve tras esta falta de respeto a Jesucristo. Dios siempre saca bien de las cosas malas que ocurren”.
Es la segunda vez en las últimas semanas que una iglesia católica de Queens se convierte en blanco de profanaciones. El 18 de mayo, un sospechoso irrumpió en la iglesia de Nuestra Señora de Fátima, en East Elmhurst, y robó estatuas, objetos religiosos y dinero en efectivo.
El intruso entró en la iglesia, situada en el 25-02 de la calle 80, a través de una puerta que no estaba cerrada con llave y forzó una puerta del perímetro interior, según informó la policía.
El individuo se llevó diversas estatuas y otros artículos religiosos por valor de 890 dólares y se apoderó de unos 60 dólares en efectivo.
Según la policía, no había nadie más en la iglesia de Nuestra Señora de Fátima en el momento del robo.
De acuerdo con los primeros informes de la policía de Nueva York, el incidente de la iglesia de San José tuvo lugar por la mañana.