LA HABANA (CNS) — El Movimiento Cristiano de Liberación en Cuba ha pedido a la gente que continúe presionando a las autoridades comunistas para que celebren elecciones generales.
El país ha sido testigo de manifestaciones en sus principales ciudades a las que se unieron miles de personas para protestar por la escasez sin precedentes de artículos esenciales y el creciente número de muertos causados por COVID-19.
Miles de personas salieron a las calles el 11 de julio en una protesta sin precedentes contra el gobierno en Cuba, animados por gritos de “Libertad”, “No tenemos miedo” y “Abajo la dictadura”, informó ucanews.com.
Las protestas estallaron en medio de una creciente ira debido a las largas filas de alimentos y la escasez de medicamentos, mientras que las infecciones y muertes por coronavirus continuaron aumentando.
Eduardo Cardet Concepción, coordinador nacional del Movimiento Cristiano de Liberación, conocido como MCL por sus siglas en español, dijo que miles de cubanos exigían libertad y el fin de la represión y la miseria.
“La MCL, como parte de este pueblo cansado de la opresión y la injusticia, se identifica plenamente con sus deseos. Apoyamos a nuestros hermanos y hermanas del Movimiento Cristiano de Liberación ya todos los cubanos que se manifiestan pacíficamente, haciendo uso de este legítimo derecho”, la organización dijo en un comunicado.
El grupo también exigió “la liberación de los presos políticos, la anulación de las leyes represivas contra la libertad, el reconocimiento de los derechos económicos de libre empresa de los cubanos y el reconocimiento del derecho de cada cubano, dentro y fuera de la isla, al voto y a ser elegido”, decía.
COPE: Eduardo Cardet, en 'La Linterna': "Cuba viene 62 años sufriendo de una crisis en todos los órdenes"
El coordinador nacional del Movimiento Cristiano de Liberación ha analizado en 'La Linterna' las claves de las protestas contra el régimen en Cubahttps://t.co/8yfHlRgAyo— MCL (@oswaldopaya) July 12, 2021
El disidente católico Oswaldo Payá Sardinas fundó el MCL en 1988 para lograr una reforma democrática pacífica en Cuba, inspirado explícitamente en la doctrina social católica.
Aprovechando un vacío legal en la constitución de Cuba, Payá organizó una recolección de firmas para introducir la democracia en el país que se conoció como Proyecto Varela, en memoria del sacerdote y patriota cubano venerable Félix Varela. Como consecuencia, el movimiento fue perseguido en todo el país y 42 de sus líderes fueron encarcelados durante la ola represiva de 2003 conocida como la “Primavera Cubana”.
Paya y otro líder de MCL, Harold Cepero, murieron en un accidente automovilístico en circunstancias sospechosas el 22 de julio de 2012.
Durante un discurso en la televisión el 11 de julio, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel, quien también encabeza el Partido Comunista, culpó a Estados Unidos por los disturbios y llamó a “todos los revolucionarios del país, todos comunistas, a tomar las calles y marcharse”. los lugares donde se van a producir estas provocaciones “para contrarrestar las protestas.
El MCL condenó la violencia de cualquier lado y criticó el llamado de Díaz-Canel al enfrentamiento entre los cubanos.
“No más gritos de dolor. Es hora de reaccionar y decirles a los tiranos que su reinado de terror y miseria ha llegado a su fin. Solo el pueblo puede salvar al pueblo”, dijo el grupo en su comunicado.
The Associated Press informó que la manifestación en La Habana aumentó a unos pocos miles mientras la gente marchaba por la capital a pesar de ser acusada por agentes de policía, quienes también lanzaron gases lacrimógenos contra la multitud. La gente parada en los balcones aplaudió a los manifestantes cuando pasaban mientras otros se sumaban a la marcha.
Las autoridades cubanas cerraron el servicio de Internet a medida que crecía la manifestación y los manifestantes intentaron usar teléfonos celulares para transmitir la protesta en vivo.
En un comunicado emitido por la Casa Blanca el 12 de julio, el presidente Joe Biden dijo que Estados Unidos apoya al pueblo de Cuba en su llamado a la libertad y alivio de la pandemia y décadas de represión y sufrimiento económico.
“El pueblo cubano está afirmando con valentía los derechos fundamentales y universales”, dijo Biden. “Esos derechos, incluido el derecho a la protesta pacífica y el derecho a determinar libremente su propio futuro, deben ser respetados”.