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CIUDAD DEL VATICANO—. Según un reportaje publicado en el periódico italiano Corriere della Sera, el Papa Francisco le escribió al mandatario venezolano Nicolás Maduro para decirle que aunque está a favor de una solución negociada para la crisis política del país, las conversaciones anteriores fracasaron porque no se respetaron los acuerdos.

Las partes involucradas en tales conversaciones, insistió el pontífice, deben priorizar el bien común por encima de los objetivos partidistas.

Dirigiéndose a Maduro como “Muy excelente señor” y no como “presidente”, según el diario italiano, el Papa Francis le habría dicho a Maduro en una reunión el pasado 7 de febrero que no está a favor de “cualquier tipo de diálogo”.

Lo que apoya el pontífice es un esfuerzo en el que “las diferentes partes en conflicto pongan el bien común por encima de cualquier otro interés, y trabajen por la unidad y la paz”.

La carta del papa Francisco responde a otra enviada por el gobernante venezolano mientras el Santo Padre visitaba los Emiratos Árabes Unidos.

“Desafortunadamente, cada [intento] fue interrumpido porque lo que se había acordado en las reuniones no fue acompañado por gestos concretos para implementar los acuerdos… Y las palabras parecían deslegitimar las buenas intenciones de lo que se había acordado por escrito”, reporta el artículo que escribió el Papa.

Maduro se ha pronunciado en más de una ocasión contra los obispos de Venezuela y contra el cardenal italiano Pietro Parolin, mano derecha de Francisco y ex representante papal en el país latinoamericano.

En la carta, el Papa describe el papel desempeñado por la Santa Sede y los obispos de Venezuela “como garantes del diálogo a solicitud de las partes involucradas”, en un proceso que comenzó a fines de 2016, en un intento por salir de la crisis “de manera pacífica e institucional”.

La crisis constitucional alcanzó su punto crítico luego de la toma de posesión del presidente venezolano, Nicolás Maduro, el pasado 10 de enero. Las acusaciones de manipulación electoral por parte de observadores locales e internacionales hicieron que Juan Guaidó, presidente de la legislatura liderada por la oposición, asumiera la presidencia el 23 de enero.

Desde entonces, la comunidad internacional ha tomado partido, por una parte Estados Unidos, junto a la mayor parte de la Unión Europea y América Latina apoyando a Guaidó, mientras que Rusia, Cuba, China, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos respaldan a Maduro.

En comentarios recientes sobre el tema, la administración Trump no descartó la posibilidad de utilizar la fuerza militar en Venezuela.

@realDonaldTrump no descarta el envío de 5000 soldados a #Colombia, la reunión tuvo como eje central “restaurar la democracia en #Venezuela”, Trump también afirmó que Colombia tiene un papel muy importante para lograr una solución del problema tanto política como social. pic.twitter.com/sdokFkpvnG

— Voces en Off (@VocesenOff_) February 14, 2019

Por otra parte, a petición de Maduro, el ejército nacional ha bloqueado la ayuda externa que se envió al pueblo venezolano, que perdió un promedio de 16 libras en 2017 debido al hambre. El país terminó 2018 con una tasa de inflación del 8,000%.

En una entrevista con la BBC el martes, Maduro dijo que no permitiría la ayuda, afirmando que era un medio para que los Estados Unidos intervinieran en Venezuela. Hablando en un mitin el mismo día, Guaidó dijo que la comida entraría por diferentes rutas porque, de lo contrario, “300,000 venezolanos morirán”.

“Hay casi dos millones de personas cuya salud está en riesgo”, añadió.

En su carta, el papa Francisco se refirió a los esfuerzos anteriores para ayudar a encontrar una solución a la crisis venezolana, solicitada por Maduro y la oposición. Uno de los requisitos en 2016 fue que el gobierno reconozca una crisis humanitaria para que pueda ingresar la ayuda externa, pero Maduro se niega constantemente a hacerlo.

Otra condición para el diálogo fue que Maduro convocara a elecciones nacionales, lo que técnicamente hizo, pero ganó en circunstancias cuestionables, ya que la mayoría de los líderes de la oposición estaban en prisión.

El papa Francisco recuerda una carta enviada por Parolin a Maduro en diciembre de 2016 en la que la “Santa Sede indicó claramente cuáles eran las condiciones para que el diálogo fuera posible”. El Papa señala que aún considera que esas solicitudes son indispensables para que se desarrolle el diálogo y añade que “desde entonces se han sumado otras como resultado de la evolución de la situación”.

Entre las nuevas condiciones, Francisco habla de la necesidad de “evitar cualquier forma de derramamiento de sangre”.

Una delegación parlamentaria enviada por Guaidó se reunió con el arzobispo venezolano Edgar Peña Parra, un alto funcionario de la Secretaría de Estado del Vaticano, esta semana en Roma.

Según Rodrigo Diamanti, quien está a cargo de la ayuda humanitaria enviada a Venezuela desde Europa y formó parte de la delegación, Mons. Peña Parra se comprometió a apoyar los esfuerzos para garantizar elecciones libres y expresó “la voluntad de hacer todo lo posible para que este año podamos tener elecciones libres en Venezuela”.

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Inés San Martín es una periodista argentina, jefa del Buró de Noticias de Crux en Roma. Antes de unirse a Crux, Inés fue mánager de redes, directora de contenido y diseñadora gráfica de Contá con Nosotros, y trabajó como reportera y editora de Valores Religiosos en Buenos Aires. También dirigió la oficina de prensa internacional para la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro en 2013. Inés es licenciada en comunicaciones sociales y periodismo por la Universidad Austral en Buenos Aires y la Universidad de Navarra en Pamplona, España.