Nuestras parroquias

San Benito José Labre: donde reinan la caridad y la buena voluntad

QUEENS—. Los orígenes de la comunidad de San Benito José Labre datan de 1868, cuando en medio de grandes extensiones de tierras destinadas a la agricultura, en un área llamada West Jamaica, un abogado y un arquitecto compraron una granja con el propósito de convertirla en un asentamiento que luego sería, junto con Clarenceville, una de las comunidades residenciales más antiguas de Long Island.

Allí, para 1869, se adelantaron desarrollos de infraestructura trazando calles y avenidas y el terreno se dividió en lotes. Posteriormente Frederick W. Dunton, sobrino de Austin Corbin, quien era el presidente de Long Island Railroad, desarrolló un proyecto de bienes raíces llamado Morris Park que se convirtió en una villa que tuvo incluso su propia estación de tren.

El pequeño grupo de católicos establecidos en Clarenceville, Richmond Hill y Morris Park estaba compuesto principalmente por inmigrantes irlandeses y alemanes, que para asistir a misa se desplazaban a las iglesias de Santa Mónica, en Jamaica, o Santa Isabel, en Woodhaven. Por tal motivo, y pese a que el vecindario era en su mayoría protestante, decidieron solicitarle al obispo de Brooklyn que fundara una parroquia en su área.

Esta imagen de San Benito José Labre tallada en madera fue donada por Monseñor Henry Hald durante su pastorado y se encuentra ubicada mirando al altar pues el santo pasaba horas adorando al Santísimo Sacramento. (Marietha Góngora/ Nuestra Voz)

El 12 de julio de 1892, cuatro meses después de ser nombrado segundo Obispo de Brooklyn por el Papa León XIII, Monseñor Charles Edward McDonnell dio vía libre a la construcción de la iglesia para esta área de Queens y nombró como párroco fundador al padre William J. Maguire.

El obispo, gran devoto de San Benito José Labre, decidió que la nueva iglesia llevaría su nombre y curiosamente hasta 1998 fue la única iglesia en el mundo dedicada al joven santo francés, quien además de pasar largas horas adorando al Santísimo Sacramento, decidió vivir buena parte de su vida adulta como desamparado, hasta sus 35 años, cuando murió un Jueves Santo.

La comunidad de San Benito José Labre se congregó para celebrar la primera misa el 24 de julio en 1892 en la primera iglesia de madera, en la que el Obispo McDonnell colocó la piedra angular el 6 de noviembre de 1892 y dedicó el 8 de octubre de 1893. La rectoría fue terminada en 1895.

En 1916 comenzó la construcción de una nueva iglesia de ladrillo estilo románico y la antigua se trasladó a la Calle 117 para servir como salón parroquial. En octubre del mismo año se puso la primera piedra y el 4 de mayo de 1919 fue dedicada por Mons. McDonnell.

La escuela parroquial abrió sus puertas en 1912 y fue objeto de obras de ampliación de 1938 a 1939, mismo año en que terminó la construcción del convento. En la década de 1940 el país llora los miles de militares fallecidos y heridos en la Segunda Guerra Mundial, son años difíciles para la nación y para esta comunidad donde muchos de esos héroes que defendieron su país en tierras lejanas no lograron volver con sus familias.

Con este bello conjunto de vitrales, ubicado al costado derecho de la iglesia, se le rinde tributo a San Benito José Labre, recreando escenas de su vida y su camino a la santidad. (Marietha Góngora/ Nuestra Voz)

El entonces párroco de la iglesia, Monseñor Henry Hald, quiso rendir un homenaje a todos los que perecieron en el cumplimiento de su deber, así como a sus familias, y emprendió una campaña para recolectar joyas, piedras preciosas y semipreciosas para fundir una custodia que contara la historia del sacrificio y honor de los héroes de su parroquia. Dicha custodia, que mide 30 pulgadas y pesa 12 libras, es uno de los símbolos más emblemáticos y representativos de solidaridad y gratitud de esta comunidad.

El 23 de octubre de 1971 un incendio en la sacristía destruyó todos los vitrales, derritió los metales de elementos religiosos y redujo a cenizas todo a su paso. Solo este vitral de San Benito José Labre quedó intacto. (Marietha Góngora/ Nuestra Voz)

Hoy en día, “la parroquia es mayoritariamente hispana. El grupo más grande de feligreses es de origen mexicano, seguido luego por ecuatorianos y otros países de América del Sur”, explica el padre Philip Pizzo, quien sirvió a esta comunidad en calidad de párroco por 7 años.

Como cuenta el pastor emérito, curiosamente el vecindario no es hispano sino que en su mayoría provienen de India e incluso existe una inmensa comunidad sij en las cercanías de esta parroquia.

Entre los grupos parroquiales se destacan el RICA y catequesis para niños, grupo de Cursillo de Cristiandad, grupo Levántate, Grupo de Oración, Grupo de Jóvenes, Grupo Despensa de Alimentos Vicente de Paúl, Grupo de Adultos Mayores, grupo de música y coro y grupo V Encuentro entre otros.

Así mismo, las devociones que sobresalen en esta parroquia son la de San Benito José Labre, la Virgen de la Medalla Milagrosa, la Divina Misericordia, Nuestra Señora de Guadalupe y San Diego, estas dos conforman una fiesta litúrgica que congrega gran cantidad de fieles así como la fiesta patronal que se celebra el 16 de abril.


Parroquia San Benito José Labre
94-40 118th St.,
Richmond Hill, NY 11419
Tel. (718) 849-4048
www.stbenedictjosephlabre.org

Administrador: Padre John Tino

Horario de misas:
Sábados: 5:00 p.m. (inglés).
Domingos: 10:00 a.m. (inglés) y 11:30 a.m. (español).
Lunes a sábados: 9:00 a.m. (inglés).
Primer viernes y tercer jueves del mes: 7:30 p.m. (español).

Horario de rectoría:
Lunes a viernes: De 9:30 a.m. a 4:30 p.m.