Cuando comenzó la producción de un nuevo remake del icónico musical teatral “West Side Story” (Amor sin barreras), por supuesto se buscaron localizaciones en el Upper West Wide de Manhattan para el rodaje: ¡de ahí viene el título original de la historia!

Sin embargo, aunque la historia en sí está ambientada en Manhattan, hay un lugar en Brooklyn que los productores no podían pasar por alto cuando intentaban recrear la sensación de la ciudad de Nueva York de mediados de los años 50. Ese lugar era el famoso gimnasio Mons. King Hall de Santo Tomás de Aquino, en Flatlands.

Todo comenzó con una llamada telefónica. Un reclutador de emplazamientos de la 20th Century Fox se puso en contacto con el párroco de la iglesia, el padre Dwayne Davis, para visitar el gimnasio de la escuela. Al principio, el padre Davis no sabía que sería para esta película, pero se alegró de recibir al reclutador en la parroquia.

Por aquí, el Msgr. King Hall -y su notable suelo verde- es bien conocido como centro de acción en la escena deportiva local. Antes de la pandemia, el gimnasio albergaba el torneo anual de baloncesto Msgr. King Memorial, en el que innumerables estrellas del baloncesto local -incluido el gran Chris Mullin- se calzaban las zapatillas en la pista verde. Nada más entrar, hay un santuario de recuerdos y recortes de prensa dedicados a Mullin.

Tras unas cuantas visitas de seguimiento, 20th Century Fox supo que contaba con un emplazamiento ideal, ya que el propio gimnasio se remonta más o menos a la época en que se ambienta “West Side Story”.

“Como la mayoría de los gimnasios de las escuelas católicas, sigue siendo el mismo”, dijo el padre Davis. “Realmente no ha cambiado mucho. Es un honor para la parroquia y para todos nosotros ser reconocidos de esa manera para celebrar la historia de lo que somos como comunidad parroquial.”

A mediados de junio de 2019 comenzó el rodaje, que supuso una toma de posesión completa por parte de la productora. Afortunadamente, los estudiantes estaban terminando sus clases, por lo que el rodaje no interfirió con la vida cotidiana de la escuela. Inicialmente programado para durar dos semanas, el rodaje acabó durando más de un mes para asegurar que todo quedara bien para el montaje final.

El padre Davis tenía órdenes estrictas del estudio de mantener todo esto en secreto hasta el estreno de la película. Eso debió de ser un reto, ya que el director de la película era la leyenda viva Steven Spielberg, que estaba allí mismo, en el gimnasio.

“Recuerdo haber estado en el gimnasio la primera vez que entró Steven Spielberg”, dijo el padre Davis. “Le fascinó ver todas las camisetas colgadas. Me trajo algo de nostalgia.

“Pude verle (a Spielberg) de primera mano y cómo hacía las cosas. A veces había escenas que tenían que hacerse al menos cinco o diez veces. Esa es una de las cosas que más me impresionó. Cuando entraba en el gimnasio, se sentaba en el suelo. Tenía buen ojo para lo que quería”.

20th Century Fox realizó algunos cambios en el interior, como colgar nuevas cortinas y colocar un suelo de madera para cubrir el suelo verde del gimnasio. En total, el gimnasio apareció durante unos 10 minutos en la película. Casi un mes de rodaje para tan sólo 10 minutos: eso demuestra la cantidad de detalles que entran en la producción de una película.

Tras retrasarse un año debido a la pandemia, la película se estrenó a finales de noviembre de 2021. En lugar de su fiesta anual de Navidad, los feligreses de Santo Tomás de Aquino y Nuestra Señora Auxilio de los Cristianos, de Midwood, fueron invitados a una proyección privada de la película en el Regal UA de Sheepshead Bay. En lugar de permanecer en silencio durante toda la proyección, los feligreses aplaudieron cuando aparecieron en pantalla las escenas realizadas en el Monseñor King.

Con la temporada de premios a la vuelta de la esquina, “West Side Story” fue nombrada una de las 10 mejores películas de 2021 por la National Board Review y el American Film Institute. También recibió cuatro nominaciones a la 79ª edición de los Globos de Oro y 11 nominaciones a la 27ª edición de los Critics’ Choice Awards.

Al igual que el sector dedicado a Mullin, el padre Davis espera tener pronto un sector en el gimnasio dedicado a “West Side Story”. El gimnasio es la sede de algo más que deportes, y acoger esta producción muestra cómo el gimnasio es también un centro de cultura y artes teatrales.

“Una de las cosas que tienen los gimnasios de las escuelas católicas es que no son sólo tradicionalmente gimnasios”, dijo el padre Davis. “Son el centro de la comunidad y en ellos ocurren muchas cosas. Claro que hay deportes, pero también hay obras de teatro, conciertos y bailes, así que realmente se cierra el círculo en ese sentido”.

Además de todas esas cosas, el gimnasio de Santo Tomás de Aquino fue una de las mayores despensas de alimentos de Brooklyn durante el apogeo de la pandemia, alimentando a 1.000 personas al día. La parroquia recibió un premio del entonces presidente del distrito de Brooklyn y ahora alcalde, Eric Adams, como parte del programa Héroes de Brooklyn COVID.

En los buenos y en los malos tiempos, el gimnasio es el centro de la comunidad de Flatlands. Cuando no lo ocupen los “Jets” y los “Sharks”, el Msgr. King Hall seguirá siendo un refugio deportivo y cultural para la juventud de Brooklyn.