NUEVA YORK—. A finales de mayo Andy Byford, presidente de la Autoridad Metropolitana de Trasporte (MTA) desde enero de este año, anunció el lanzamiento del plan de modernización del sistema de transporte de la ciudad de Nueva York que incluye mejoras en la infraestructura de las estaciones del metro y en el servicio de buses y trenes.
Según el comunicado de prensa, el llamado Fast Forward Plan contempla “transformar el metro, reinventar la red de autobuses públicos de la ciudad, mejorar la accesibilidad en todas las modalidades de transporte e involucrar y empoderar a la fuerza de trabajo de NYC Transit para ofrecer el mejor servicio posible”.
La urgencia de un plan de modernización se hace cada vez más evidente pues ya nadie se salva de las demoras y los cortes programados en el servicio de trenes, que obliga a que los usuarios programen sus rutas con anticipación y salgan con antelación hacia sus destinos.
Este plan de mejoramiento contempla tanto al aspecto técnico como la cultura corporativa en las áreas administrativas y operativas de esta agencia.
“Lo que debe suceder es una inversión sostenida a escala masiva si queremos brindar a los neoyorquinos el servicio que merecen y el sistema de tránsito que necesitan esta ciudad y el estado. Ahora es el momento de pensar a lo grande y transformar nuestra red para que funcione para todos los neoyorquinos”, dijo el funcionario.
La propuesta presentada a la junta directiva de la MTA, encabezada por Joseph Lhota, incluye los siguientes planes en materia técnica:
- Señalización e infraestructura de rieles de última generación para una óptima confiabilidad, rendimiento y seguridad: Requerirá reacondicionamiento, reemplazo o actualización de una gran cantidad de infraestructura y equipos de apoyo como sistemas de energía, tiendas, vagones y lotes de parqueo de vagones de trenes.
- Intensificar y acelerar los trabajos para garantizar un sistema totalmente accesible: Debido a la complejidad del proceso y a la inversión que requiere un sistema de esta magnitud, solo hasta 2034 podríamos ver la totalidad de las estaciones de metro dotadas con rampas, escaleras eléctricas y/o elevadores.
- Reparaciones y mejoras críticas en las estaciones: Supondrá mejoras estructurales en más de 150 estaciones en cinco años y más de 300 en 10 años, vitales para la prestación regular de servicios y la seguridad de los usuarios.
- Nueva flotilla de buses y trenes: Se esperan en cinco años más de 650 nuevos vagones subterráneos, más de 1.200 vagones reacondicionados y 2.800 buses nuevos, incluidos 200 buses eléctricos. Dentro de 10 años habrían 3 mil nuevos vagones de metro y 2.100 buses nuevos, incluidos 1.600 buses eléctricos.
- Rediseño de rutas de buses: Actualmente se revalúa toda la red de rutas para buses locales y expresos en los cinco condados. El rediseño se hace según la clase de usuarios que hacen uso de este servicio, las condiciones de operación en las vías y las opiniones de los usuarios, vecinos de las rutas, defensores y otros. Se espera que esté listo en cinco años.
- Modernizar enfoque de la seguridad: La autoridad del transporte trabaja en colaboración con el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) para apoyar la expansión de un esquema de vigilancia policial y actuar en casos de asalto y otros delitos en el sistema. Las medidas de seguridad incluyen adquirir últimas tecnologías de detección y establecer una línea directa de denuncias confidenciales que opere 7/24.
Así las cosas, a los 1.727’366.607 usuarios que abordamos los trenes del metro de Nueva York en 2017, no nos queda más que armarnos de paciencia ante las cada vez más frecuentes demoras o cancelaciones de servicio mientras avanzan estas obras de “modernización”.