No solo la oración está ayudando a la comunidad provida en sus argumentos contra el aborto. La ciencia también la respalda, opinan los expertos.
Según médicos y líderes del movimiento, avances como el ultrasonido están reforzando la postura provida.
Las pruebas que muestran que los latidos del corazón de un bebé pueden detectarse a las seis semanas de embarazo están impulsando la lucha provida.
Otros avances científicos han hecho que sea más fácil para los cirujanos operar a un bebé que aún está en el útero materno, lo que aumenta las posibilidades de que el bebé sea visto como un ser humano que merece vivir.
“No es solo cuestión de fe. Es ciencia”, asegura el Dr. David Prentice, vicepresidente y director de investigación del Instituto Charlotte Lozier en Virginia. “Durante los últimos años, la ciencia ha validado lo que hemos estado defendiendo de corazón. Realmente hemos logrado avances significativos”, dijo el Dr. Prentice.
El ultrasonido es un componente crucial en la lucha por salvar a los nonatos, afirman los médicos.
“En los llamados ‘centros de crisis de embarazo’ tenemos una tasa de éxito del 70-80 por ciento de mujeres que vienen dispuestas a realizarse un aborto y cambian de opinión después de una ecografía”, dijo el Dr. Lester Ruppersberger, ex presidente de la Asociación Médica Católica y obstetra jubilado en Filadelfia.
“Llegan muy atormentadas y estresadas. Sin embargo, cuando ven las imágenes, se dan cuenta de que lo que están a punto de abortar es un ser humano, no un grupo de células. Y optan por la vida”, dijo el Dr. Ruppersberger.
Un ultrasonido usa ondas sonoras de alta frecuencia para capturar imágenes dentro del cuerpo. Se han utilizado durante décadas, pero los exámenes se han vuelto más sofisticados en los últimos años, proporcionando a los pacientes imágenes mucho más detalladas.
La cantidad de abortos realizados en los Estados Unidos disminuyó un 22 por ciento entre 2009 y 2018, según los Centros para el Control de Enfermedades de EE. UU. (CDC, por sus siglas en inglés).
Aún así, se realizaron 619,591 abortos en 2018, como lo reflejan las cifras de los CDC. El estado de Nueva York ha sido apodado “la capital del aborto” de la nación.
Según el Instituto Guttmacher, en 2017 se realizaron 105,380 abortos en el estado. Nueva York representó el 12,2 por ciento del total de abortos realizados en los Estados Unidos.
Kathleen Gallagher, directora de actividades provida para la Conferencia Católica del Estado de Nueva York, dijo que los defensores están utilizando hechos basados en la ciencia en sus esfuerzos por salvar a los nonatos.
“No hay duda de que los avances médicos facilitan que las personas reconozcan la humanidad de un feto”, dijo.
La posición provida seguirá fortaleciéndose porque hay más evidencia científica en camino, dijo el Dr. Ruppersberger.
Por ejemplo, los avances en la tecnología de sonido muy pronto producirán pruebas que puedan detectar los latidos del corazón de un bebé antes de las seis semanas.
Kathleen Gallagher agregó que es desconcertante por qué esta misma evidencia científica no persuade a quienes apoyan el aborto.
“Los médicos se tomarán el tiempo para salvar a los bebés prematuros pero, al mismo tiempo, en otra ala del hospital, otros médicos están realizando abortos”, dijo.
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