Biblia

Imágenes e ídolos

160801 caballos
Ilustración: Rafael Domingo

“La Iglesia Católica adora a los ídolos”. “La Biblia prohíbe las imágenes”. Éstas frases y otras parecidas se escuchan con frecuencia. Seguramente las ha oído usted en conversaciones con amigos o conocidos. Pero, ¿qué hay de verdad en estas afirmaciones? Ya se sabe, si una mentira se repite muchas veces, la gente termina por creer que es verdad.

Una compañera de trabajo pentecostal me repetía con frecuencia el tema de “los ídolos en la Iglesia Católica”. Un día le pedí que me mostrara su cartera. Muy confiada la abrió. Vi una foto y le pregunté: “¿Quién es el de la foto?” Dándole un beso respondió: “Es mi hijo”. “¿De veras?”, le contesté. “Bueno, es la fotografía de mi niño”, concedió. Pues en la Iglesia Católica ocurre lo mismo tenemos fotos, pinturas e imágenes que representan a Jesús, a María, o a los santos. Obviamente, el niño no estaba en la cartera,sólo su foto,pero la besó como si estuviera presente.

Si se ha de estudiar en la Biblia el tema de imágenes e ídolos, no se puede olvidar sino recordar con veneración el primero de los mandamientos, que se encuentra en el libro del Éxodo. “No tendrás otros dioses fuera de mí. No te hagas ningún ídolo”.

Sabemos que después de su larga estancia en Egipto, en su paso por el Mar Rojo y al caminar por el desierto, el pueblo de Israel descubre a Yahvé como el único y supremo Ser.

Sin embargo, al llegar a la tierra prometida se encontró con un confuso y diversificado mundo religioso, lleno de dioses, con atrayentes cultos y prominentes templos.

La cita del Éxodo condena la pléyade de ídolos y dioses paganos de su entorno. El texto, por tanto, es una defensa al Dios único de Israel y un rechazo a la multitud de dioses presentes en forma de postes pintados y de piedras verticales. El ídolo era un dios. Ya lo decía Isaías: “Todos los que confían en los ídolos dicen a las estatuas fundidas: «Ustedes son nuestros dioses»”. El mandamiento no tiene nada que ver con imágenes religiosas de nuestro tiempo.

Hay una gran diferencia entre imágenes e ídolos. El ídolo es un dios falso, por tanto rechazable. Una imagen es la pintura, estatua o fotografía que representa a alguien o algo.

¿Prohíbe la Biblia las imágenes? No, prohíbe ídolos. Dios quiso proteger a Israel de las prácticas idólatras, pero ellos frecuentemente las practicaban. Los profetas hablaron en nombre de Dios y se llevaron a cabo muchas reformas para purificar las malas costumbres. Dios no te prohíbe tener imágenes. Al contrario, él mismo mandó hacer imágenes. Vamos a mostrar tres ejemplos.

1. Los dos querubines construidos por Moisés y colocados encima del Arca de la Alianza.

2. Ante las mordeduras de serpiente, el Señor le dijo a Moisés: “Hazte una serpiente ardiente y colócala en un poste. El que haya sido mordido, al verla, sanará”.

3. El rey «sabio» Salomón hace imágenes. Coloca en las paredes del templo dos grandes querubines de cinco metros de alto. Además, habían esculpido doce bueyes de bronce para sostener la pila de agua colocada a la entrada del templo.

Obviamente estas imágenes no eran idolátricas sino símbolos que inspiraban al pueblo en el culto al verdadero Dios. Jesús mismo se compara con la imagen de la serpiente de bronce de Moisés. Y no la condena. Es más, dice: “Así también tiene que ser levantado el Hijo del Hombre”.

Lo que la Biblia prohíbe no son las imágenes, sino los ídolos. Nosotros nunca adoramos las imágenes, solamente las respetamos o veneramos.

¿Tienes alguna imagen religiosa preferida?