CIUDAD DEL VATICANO (Por Carol Glatz/CNS)—. Nadie debe temer que Dios haya permitido la existencia de diferentes religiones en el mundo, dijo el papa Francisco.
“Pero sí, debemos tener miedo si no trabajamos por la fraternidad, para ir juntos en la vida” como hermanos y hermanas de una familia humana, dijo.
Como es costumbre, en su audiencia general el 3 de abril, el primero después de su viaje del 30 al 31 de marzo a Marruecos, el papa Francisco revisó su visita.
La gente podría preguntar: “¿por qué el papa va a los musulmanes y no sólo a los católicos?” dijo el papa.
Católicos y musulmanes “somos descendientes del mismo Padre, Abraham” dijo, y el viaje fue “otro paso en el camino del diálogo interreligioso con nuestros hermanos musulmanes”.
El papa dijo que quería seguir los pasos de dos grandes santos: san Francisco de Asís, que llevó un “mensaje de paz y fraternidad” al Sultán al-Malik al-Kami hace 800 años, y san Juan Pablo II, quien visitó Marruecos en 1985.
El papa Francisco dijo que la gente también puede preguntarse por qué Dios permite que haya tantas religiones diferentes en el mundo.
Algunos teólogos dicen que es parte de la “voluntad permisiva” de Dios, quien permite la realidad de muchas religiones y de otras religiones que “nacen de la cultura y miran siempre al cielo buscando Dios”, dijo el papa.
“Lo que Dios quiere es la fraternidad entre nosotros”, dijo, y “no debemos asustarnos de la diferencia. Dios ha permitido esto”. Pero es correcto preocuparse cuando las personas no están trabajando hacia un mundo más fraternal, agregó.
El comentario del papa sobre la “voluntad permisiva” de Dios aclaró una controversia que surgió durante el viaje del papa en febrero a Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos.
Él y Sheikh Ahmad el-Tayeb, una importante autoridad para muchos musulmanes suní, firmaron un documento sobre la fraternidad humana que decía: “El pluralismo y la diversidad de las religiones, el color, el sexo, la raza y el idioma son queridos por Dios en su sabiduría, a través del cual creó a los seres humanos”.
En su discurso durante la audiencia del 3 de abril, el papa aclaró que Dios no creó la diversidad religiosa, sino que permite que esto suceda, ya que creó seres humanos con libre voluntad.