CIUDAD DEL VATICANO (Por Cindy Wooden/CNS)—. Con tantos niños en el mundo que necesitan un buen hogar y tantas parejas que no pueden tener hijos, debe haber una manera de hacer la adopción más fácil y menos costosa, dijo el Papa Francisco.
Al reunirse el 24 de mayo con representantes del Instituto de los Inocentes de Florencia, Italia, el Papa Francisco dijo que le sorprendió la idea de que, en los viejos tiempos, cuando dejaban un bebé en el instituto, se le daría la mitad de un Medalla, mientras que a la madre se le entregaría la otra mitad.
“Hoy en el mundo hay muchos niños que tienen la mitad de una medalla”, dijo el Papa. “Están solos, son víctimas de la guerra, víctimas de la migración, son menores que migran sin compañía de adultos, víctimas de la hambruna”.
“¿Quiénes tienen la otra mitad?” preguntó el papa. “La madre iglesia. Nosotros tenemos la otra mitad. Debemos reflexionar y ayudar a nuestra gente a entender que somos responsables de esa otra mitad y ayudar a crear otra ‘casa de inocentes’, una más global, creando una actitud de adopción”.
“Muchas veces hay personas que quieren adoptar niños, pero existe una burocracia masiva”, dijo. A veces también hay corrupción y avaricia de dinero.
“Ayúdenme con esto”, pidió el papa a los representantes.”Creen una cultura de adopción, porque hay niños abandonados, solos, víctimas de la guerra y muchos otros. Que la gente aprenda a mirar la medalla y diga: ‘Tengo la otra mitad'”.
El Instituto de los Inocentes fue fundado hace 600 años como hogar para bebés abandonados. A lo largo de los siglos, el instituto evolucionó, funcionando como un orfanato, un hogar para madres solteras y una escuela para niños pobres.
El instituto ahora proporciona refugio temporal para niños de hasta 6 años de edad cuyas familias no pueden cuidarlos; trabaja con los padres para prepararlos para reunir a su familia, pero también con el sistema gubernamental de cuidado de crianza y el servicio de adopción. Sin embargo, gran parte de su trabajo actual es como un centro de investigación y documentación, que supervisa y desarrolla programas para la salud y la educación de los niños.
Los comentarios del Papa Francisco sobre la adopción fueron improvisados. También tuvo un discurso preparado para la ocasión y le entregó una copia al director del instituto.
En el texto, el Papa se centró en la obligación de toda la comunidad de brindar a cada niño el mejor cuidado posible.
Hoy en día, “debemos cuidar a muchos niños rechazados, despojados de su infancia y su futuro; los menores que se enfrentan a viajes desesperados para escapar del hambre o la guerra; los niños que nunca ven la luz del día porque sus madres están sometidas a dificultades económicas, social y culturales que las obligan a renunciar a ese maravilloso regalo que es el nacimiento de un niño”, dijo el papa Francisco.
