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En espiral la violencia que sacude a México

LAS CIFRAS DE HOMICIDIOS del pasado junio en el país azteca muestran uno de los panoramas más sombríos en los últimos 20 años, al haberse registrado el mes más violento desde 1997 con 2,234 asesinatos, según un comunicado del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública de México.

Fotos: Catholic News Service . Un grupo de civiles armados en el sureño estado mexicano de Guerrero el 28 de mayo pasado.
Fotos: Catholic News Service .
Un grupo de civiles armados en el sureño estado mexicano de Guerrero el 28 de mayo pasado.

Las estadísticas del gobierno federal también muestran que en los primeros meses de 2017 el país registró 12,155 homicidios, casi 31% más en comparación al mismo periodo del 2016 además de la cifra semestral más alta también en dos décadas.

De acuerdo al reporte, los estados que encabezaron las estadísticas de asesinatos entre enero y junio fueron Guerrero, con 1.161; el Estado de México, con 1.026; Baja California, con 922; Chihuahua, con 793; y Veracruz, con 790.

El estado fronterizo de Chihuahua, que había encontrado cierta calma tras la ola de violencia que tuvo su apogeo en 2010, registró un 55% más de asesinatos en 2017 con respecto al primer semestre del año anterior, según las estadísticas.

“La violencia en espiral es uno de los comportamientos más perversos que podemos identificar en una sociedad”, nos comentó en entrevista la periodista mexicana Alicia Unger, añadiendo que “el fenómeno que ocurre en México es el ejemplo perfecto, para en este tipo de violencia, ya que el sistema está coludido en sus diferentes rubros”.

Unger se refiere a la realidad de corrupción que vive México, país que desde 2006 vive sumido en una guerra contra el narcotráfico que cobra, hasta la fecha, más de 170 mil muertos.

Balas confiscadas en Ciudad Juaréz, México.
Balas confiscadas en Ciudad Juaréz, México.

Las alarmantes cifras se enmarcan dentro de la llamada “guerra contra el narcotráfico”, iniciada en el 2006 por el gobierno del presidente centroderechista Felipe Calderón. Desde ese entonces, las ciudades y pueblos a lo largo y ancho de la nación azteca, especialmente en los estados de Guerrero, Sinaloa y Tijuana, se han convertido en escenario de violentos sucesos entre los carteles y las fuerzas armadas, apoyadas por Estados Unidos y Colombia.

Pero esta alianza ha dejado mucho que desear y un sabor amargo en el corazón de la ciudadanía mexicana que sufre día a día la injusticia y el temor. “Una de las estrategias del gobierno mexicano para mantener la corrupción en el sistema político, económico y de seguridad a nivel nacional, es el fomentar la moral de que solo aquel que logra engañar a otro adquiere fuerza y poder entre un pueblo oprimido, ignorante y hambriento”, sostiene Unger.

Hoy por hoy, nueve carteles de droga controlan los 23 estados de los 32 estados de la República Mexicana, en una guerra que parece no tener fin.