EL SUPER BOWL es el evento deportivo más importante de Estados Unidos. Una buena oportunidad para compartir con los amigos y la familia y disfrutar juntos del juego y la comida.
Estas albóndigas de pollo con salsa búfalo son especiales para esta celebración o para picar en cualquier otra fiesta, como los Premios Oscar que se celebran también este mes. Lleva muchos ingredientes, pero la receta no es nada complicada. Da para 16 albóndigas del tamaño de una pelota de golf.
INGREDIENTES:
Para el sofrito crudo:
• 1 ramo de cilantro
• 2 dientes de ajo
• 1/2 cebolla morada mediana • 1/2 pimiento rojo
• 1 ají cubanelle
• 1 cdta de comino en polvo
• 1 cdta de paprika
Para las albóndigas:
• 1 lb de picadillo de pechuga de pollo • 1 taza de panko
• 1 huevo
• 1/3 de taza de sofrito crudo
• 1/2 cdta de sal
• 2 cdas de aceite vegetal
Para la salsa Buffalo:
• 2/3 de taza de salsa Buffalo • 1/2 taza de azúcar moreno • El jugo de una lima
PREPARACIÓN
Pon todos los ingredientes del sofrito crudo en la batidora o en el procesador de alimentos y haz una pasta con ellos. No vas a usar todo, así que mezcla 1/3 de taza con el picadillo de pollo, el panko, la sal y el huevo. El mejor modo de hacerlo es con las manos. Asegúrate de que las tienes limpias. Reserva el resto del sofrito para otra receta (un guiso, una sopa o un potaje).
Precalienta el horno a 450 F. Cubre una bandeja resistente al calor con papel de aluminio. Pon las 2 cucharadas de aceite en un cuenco del que se te sea fácil tomarlo para untarte las manos con él, pues te las debes engrasar para darle forma a las albóndigas sin que te peguen en las manos. Ve haciendo bolitas del tamaño de una pelota de golf y colocándolas en la bandeja. Hornea durante 10 minutos. Mientras tanto, haz la salsa. Une todos los ingredientes en una sartén o una cazuela mediana ancha y cocina a fuego medio unos 10 minutos. El azúcar debe desleírse totalmente y la salsa debe reducirse casi a la mitad. Cuando estén las albóndigas y la salsa se encuentre en su punto, echa las albóndigas en la cazuela. Cocina unos 4-5 minutos, moviendo la cazuela con fuerza para que las albóndigas se vayan volteando y cubriéndose con esa salsita Buffalo “mejorada”, rica y pegajosa. Mueve la cazuela y no las albóndigas, para que no se maltraten. Quedan jugosas por dentro y pegajosas por fuera, aunque no se pegan entre ellas.
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Verónica Cervera es blogger y autora del libro ‘La cocina cubana de Vero’. Puedes seguirla en las Instagram y Twitter en @lacocinadevero. No te pierdas sus nuevas recetas en http://lacocinadevero.com/
